El Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó la renegociación del acuerdo con la Argentina y que habilita un desembolso de US$7.500 millones de dólares. En breve, Sergio Massa se reunirá con Kristalina Georgieva y más tarde dará una conferencia de prensa con los detalles. La inversión llegará hoy mismo a las arcas del Banco Central, que sigue manteniendo sus números en rojo.
Acorde precisó NA, la votación fue unánime. Países como Alemania y Japón, siempre reticentes a las concesiones con la Argentina, dieron el visto bueno la aprobación de las últimas dos revisiones. Si bien los detalles se conocerán más tarde, con la publicación de los comunicado de la reunión de board y el staff report, se espera otro desembolso de unos USD 2.750 millones en noviembre.
El anuncio formal se conoció después de que Massa se entrevistara con funcionarios estadounidenses, como el asesor adjunto de Seguridad Nacional para Economía Internacional de los Estados Unidos, Mike Pyle, y con el asesor para América Latina, Juan González, con quienes analizó la situación bilateral y comercial de ambos países.
Esta tarde, el ministro de Economía Sergio Massa se reunirá con la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva. Posteriormente, brindará una conferencia de prensa en la embajada local. Se trata de uno de los desembolsos más grandes en la historia del organismo: todos los anteriores por sobre esa cifra también fueron destinados a la Argentina, desde 2018 a la fecha.
El destino de los US$ 7500 millones del FMI
Parte del giro irá a repagar el crédito de la CAF por u$s 1000 millones que se tomó para mantener la deuda en situación normal de pago y el préstamo bilateral de Qatar. En la víspera, Massa anunció un financiamiento extra para este año de US$ 1.300 millones del Banco Interamericano de Desarrollo y del Banco Mundial, en el marco de su visita a Washington.
«Se trata de montos que son fundamentales para sumar reservas internacionales pero también para financiar el desarrollo», destacó el funcionario en una ronda de prensa en el BID. De esta forma, estas operaciones permitirán estabilizar los dólares paralelos, mientras que el blue se verá menos presionado tras la escalada superior al 50%
