El Senado de la Nación tuvo su segunda sesión del año y, paradójicamente, fue extensa. En esta ocasión, se trataron diferentes propuestas y en horas de la noche se debatió y votó acerca de la modificación al Impuesto a las Ganancias que propuso el Gobierno, la cual quedó aprobada con 38 votos positivos y 27 negativos, todos de Juntos por el Cambio, y entrará en vigencia en 2024.
El cambio más relevante dentro de esta propuesta es la eliminación de la cuarta categoría y la creación de un tributo sobre los ingresos más altos que comprenderá a quienes perciban haberes superiores a 15 salarios mínimos, vitales y móviles (SMVM) mensuales. Para estos casos, habrá una alícuota progresiva sobre el excedente que va del 27% al 35%.
A día de hoy, 15 salarios mínimos representan más de $1.770.000, pero llegaría a $2.000.000 con el ajuste que se debatirá la semana próxima en la reunión del Consejo del Salario. Efectivamente, menos del 1% del total de las remuneraciones, jubilaciones y pensiones serán las que queden dentro de este gravamen, lo que aproximadamente son 88.000 contribuyentes en términos nominales.
Cabe recordar que el proyecto no incluye a cargos de alta responsabilidad en empresas, como directores de sociedades anónimas, CEOs, gerentes y subgerentes. También se excluyen las pensiones de privilegio y funcionarios políticos mientras que para los empleados en relación de dependencia, jubilados y pensionados que vivan en las provincias de La Pampa, Río Negro, Chubut, Neuquén, Santa Cruz, Tierra del Fuego y el partido bonaerense de Patagones, habrá un tratamiento especial.
El debate comenzó a las 18:05 y lo abrió el presidente de la comisión de Presupuesto y Hacienda, Ricardo Guerra, quien dejó en claro la finalidad de esta propuesta: «Las modificaciones que plantea el proyecto de ley parten de un concepto de no considerar al salario como una ganancia sino como lo que es, una retribución al trabajo, y en el caso de jubilaciones un haber de retiro», señaló.
