Una situación realmente fuerte se vivió en «DDM», el programa que lleva adelante Mariana Fabbiani a través de la pantalla de América TV, donde se escuchó el duro testimonio de Clemente Vera, el hombre que estuvo durante años preso por un crimen que no cometió. Ahora, tras ser liberado, rompió en llanto al hablar con la conductora.
«Casi 10 años pasó preso Clemente Vera, fue acusado del asesinato de las dos turistas francesas. Su mujer nos contó lo que fueron todos esos años para él preso, también nos dijo que había sido apoyado por el padre de una de las víctimas, quien inclusive lo ayudó en su defensa. Estuvo ocho años preso…», comenzó diciendo la presentadora.
Fue en ese momento cuando el protagonista de esta historia tomó la palabra. «Me siento muy feliz, estoy en mi casa junto a mi mujer y mis hijos. Soy inocente, luché mucho, me costó mucho demostrar esto. Recuerdo que mi hijo recién había nacido y estuve preso… fui a juicio y salí en libertad en el 2014, tuve la absolución. Pero después de un año y ocho meses volví a la cárcel y empecé la lucha. Dejar a mis hijos…», señaló entre lágrimas.
«Yo quisiera saber por qué, yo no hice nada, nunca conocí a las chicas. Pienso que fue porque soy una persona humilde, de campo, no tengo estudios, apenas terminé séptimo grado», lanzó Clemente Vera. «¿Cómo es estar preso sabiéndote inocente? Qué impotencia», indagó Mariana Fabbiani queriendo saber más.
«Yo gracias a Dios siempre fui fuerte. Vivir en la cárcel es un tormento, es muy difícil de olvidar, muy duro. Quisiera olvidarlo de un día para el otro, pero es muy difícil», sostuvo con mucha angustia. «Yo rezaba mucho, le daba gracias a Dios por haber podido salir. Gracias a todos los que me apoyaron. Si mi abogado no iba a Buenos Aires era quedarme en la cárcel para esperar la muerte porque no iba a salir nunca más», dijo conmocionando a todos.
«Fue un contexto de encierro muy duro. Mi hijo me decía ‘papá, vamos a la casa’. Fue muy duro. Él lloraba, yo no podía hacerlo delante de él, tenía que mostrar fuerzas. Después me ponía a llorar, no quería que mi hijo viva eso. Yo tenía a mis padres y ya no los tengo, ellos se cansaron de esperar mi libertad y ya no están. Fallecieron el anteaño pasado. Mis hermanos también, es muy difícil…», manifestó. «Me emociona, me emociona», sentenció Mariana Fabbiani realmente movilizada.