El Gobierno nacional anunciará hoy un nuevo acuerdo con el FMI que destrabará una serie de desembolsos, según informaron fuentes oficiales. Según se indicó, en la tarde se dará a conocer un comunicado con los términos del nuevo programa correspondiente al pago de deuda externa.
El Gobierno argentino y el FMI mantuvieron reuniones formales desde el viernes en Buenos Aires en busca de consensuar las metas que tendrá la renovación del Acuerdo de Facilidades Extendidas (EFF, por sus siglas en inglés). A su vez, Argentina pidió reprogramar para fin de mes el pago de un U$S 1.900 millones con el objetivo de ganar tiempo hasta tanto se cumplan con los procedimientos que deriven en la acreditación del desembolso.
En las próximas horas la misión del FMI deberá emitir el Staff Report Agreement que será elevado al Directorio del organismo para la aprobación definitiva. La clave del acuerdo está en la cantidad de dinero que recibirá el país. En principio se especula con el giro de los U$S 2.600 millones pendientes de noviembre y el adelanto de U$S 900 millones correspondientes a marzo.
Pero de este total no quedará nada en las arcas del central porque se deberán devolverle U$S 920 millones a la CAF y el resto se utilizarán para cancelar los vencimientos con el organismo. La trascendencia pasa por la normalización financiera del país con lo que se apunta a regenerar confianza en los mercados.
La propuesta de Caputo
Claro está que para que desde el organismo internacional acepten esto, el Gobierno también tuvo que ofrecer algo a cambio, ya que la confianza en Argentina cayó luego del incumplimiento del exministro Sergio Massa. Así, Caputo les trasladó la devaluación del peso argentino luego de asumir que tuvo aceptación y no generó movimientos en los dólares paralelos.
Además, les mostró las medidas económicas que hay en el mega DNU y la Ley Ómnibus que podrían convencer al FMI de generar un camino previsible a futuro. Por último, ratificaron la idea de hacer un ajuste fiscal todavía más fuerte del que quiere la entidad financiera, un punto central que podría convencer a sus enviados que se retiraron de Casa Rosada con la propuesta que trasladarán a Washington en las próximas horas.