En el mega DNU que anunció Javier Milei en su primera semana como presidente, uno de los artículos habilita las sociedades anónimas en el fútbol argentino, más conocidas como SAD. Esa decisión generó críticas contra el libertario que ahora, luego de enviar la Ley Ómnibus al Congreso, respaldó la posibilidad de que capitales extranjeros pongan dineros en clubes argentinos.
«Hay grupos árabes con deseos de invertir 3.000 millones de dólares«, destacó el jefe de Estado que explicó por qué incluyó esta modificación dentro de su decreto de necesidad y urgencia: «Las Sociedades Anónimas están dentro del Decreto de Necesidad de Urgencia debido a la expectativa de los inversores«, señaló el funcionario, según NA.
En este mismo sentido, subrayó que «lo interesante de las SAD es que la inversión entra muy rápido, porque es un negocio muy fácil» y anunció que «existen múltiples oportunidades para clubes extranjeros, como el caso del Chelsea que ha manifestado su intención de comprar equipos argentinos como Boca, Racing, Newell’s, Estudiantes y Lanús«.
«Si está la intención del Chelsea y la de los árabes, se genera dinero muy rápidamente. Es de rápido impacto», reiteró Javier Milei. De hecho, también le pusieron sobre la mesa la posibilidad de que los socios rechacen la privatización de los clubes y, en ese caso, el mandatario reconoció que «se seguirá con el esquema actual», en cada caso.
En este mismo sentido, le consultaron al mandatario qué haría él en caso de tener que definir con un club si aceptar capitales foráneos o no: «Yo, como hincha de Boca, preferiría que vengan extranjeros a invertir una fortuna de plata para que Boca gane siempre y River no nos pueda ganar un partido«, respondió el líder de La Libertad Avanza.
Por último, aseguró que no está enojado ni peleado con Juan Román Riquelme y que sabría de los incidentes que hubo cuando fue a votar: «Sabía que me iban a mandar gente a insultar en La Bombonera. Yo tenía esa información. Pero lo importante es que quede clara la Argentina que proponemos nosotros y cuál es la alternativa. En cualquier parte del mundo, el club estaría orgulloso de ver al Presidente de la Nación votando ahí, pero Riquelme me mandó gente para que me insulte», lamentó.
