Boca se sigue moviendo en el mercado de pases y el tercer refuerzo del club presidido por Juan Román Riquelme en el esta ventana veraniega es Lautaro Blanco. El lateral izquierdo, ex Rosario Central y de último paso por el Elche de España, llegó a Boca como una «oportunidad» en términos del propio Riquelme. Y todo arrancó gracias a una decisión tomada por Aaron Molinas.
Molinas, uno de los jóvenes surgido de las inferiores de Boca que despertó ilusión en los hinchas cuando debutó, pero no pudo asentarse y debió pasar a préstamo a otros clubes, tomó una decisión. Pese a que tenía una buena oferta desde Paraguay, eligió jugar en Defensa y Justicia por la propuesta futbolística del club de Florencio Varela. Como el gerente de fútbol de Defensa es el dueño del Elche (Cristian Bragarnik), se dio un trueque del 50% de cada jugador y Molinas deja Boca.
La despedida de Aaron Molinas
«Por este mensaje me paso a despedir», escribió emocionado el mediocampista en sus redes sociales este martes. «Agradecerles a todas las personas del club con las que compartí de Infantiles a Primera División. Compañeros, utileros, cocineros, todos los CT, cuerpo médico, empleados del club y dirigentes», enumeró Molinas en su carta de despedida.
«Agradecerles por las enseñanzas y buena predisposición del día a día compartido. Me llevo muchos amigos a los que quiero mucho. También agradecerles a los Hinchas de Boca por el apoyo y aprecio que me brindaron siempre y no voy a olvidar. Me voy feliz de haber disfrutado mucho, del poder cumplir el sueño de debutar y jugar en La Bombonera con la camiseta de Boca», manifestó Molinas.
«Seré un bostero más alentado desde donde esté. Muchas gracias Boca!!», cerró su mensaje Molinas, que deja entonces el equipo conducido por Diego Martínez para pasar a Defensa y Justicia. De esta forma, Blanco pasa del Elche al Xeneize en un trueque del mercado de pases y Boca sufre una nueva baja en su plantel.