Una situación realmente movilizante fue lo que se vivió en La Noche de Mirtha, el programa que lleva adelante Mirtha Legrand y que se emite los sábados por la noche a través de la pantalla de Canal Trece. Allí, se escuchó la palabra de Matías Bagnato, a quien le prendieron fuego su casa cuando era adolescente, y asesinaron a toda su familia.
En el ciclo, la diva le preguntó si se encontraba en pareja. «Ahora tengo 46 años. Hoy puedo decir que estoy en pareja. Chiqui, vos lo sabías. Yo no lo podía contar…», aseveró él, quien lo contó después de que el agresor falleciera. «Yo le he seguido su historia desde muy de cerca, pensaba en la angustia de vivir así… pongámonos en el lugar de él, pensar que una persona te insiste en que te va a matar», sostuvo la presentadora.
«Yo siempre lo digo, porque no es común que alguien de los medios de comunicación haga un seguimiento de un caso. Generalmente y desgraciadamente vemos tantos casos todos los días que se van tapando. Vivimos en un país donde muchas veces los jueces se ponen a laburar cuando hay presión por parte de los medios de comunicación», aclaró Matías Bagnato.
«Esa es la parte que más me indigna y por eso luché tanto por la Ley de Víctimas… Yo quería remarcar que Mirtha estuvo atenta. No me voy a olvidar nunca una Navidad en la que usted me mandó un mensaje para preguntarme con quién estaba yo pasando ese día. Hasta ese detalle tuvo, yo la adoro porque me acompañó mucho», apuntó.
Fue allí cuando el invitado recordó un terrible caso que conmocionó a nuestro país. «Luchamos mucho… siempre los que nos dicen es ‘qué suerte que tenés de estar en esa mesa’. Los familiares de las víctimas tienen desesperación por hacerse escuchar, por eso es lo que yo lucho. El caso de Ángeles Rawson… ustedes se acuerdan lo mediatizado que fue, lo que ha sido ese caso y cómo la presión mediático desvirtuó todo», manifestó.
Sin rodeos, Mirtha Legrand reveló que esto la afectó muchísimo. «A mí me pasó que me entró como una desesperación con ese caso… Yo trabajaba cerca del otro canal, le pedía a Marcelo, mi chofer, que pasara por la casa. No sé qué obsesión tenía. Hasta que un día estaba todo oscuro, me asusté y no fue nunca más. Finalmente fue el portero. Ese caso paralizó al país», aclaró. «Se sospechaba primero de la pareja de la mamá de Ángeles… y lo que afectó a esa familia esa acusación. Fue terrible», finalizó Bagnato.