Juan Román Riquelme es el presidente de Boca, pero es más que eso. Es uno de los mayores ídolos de la historia del club, sino el más grande, adorado por hinchas y fanáticos. Pero Riquelme, además de detractores, tiene críticos. Y también compañeros que brillaron a su lado y hoy tienen un mal recuerdo de él, como le ocurre a Sebastián Battaglia.
Battaglia es el jugador de Boca más ganador de la historia del club. Y con Riquelme como cabeza del fútbol xeneize, llegó a ser director técnico. Pero la relación terminó muy mal, pues Seba fue despedido tras quedar afuera de la Copa Libertadores y lanzar algunas críticas a la dirigencia. Aunque lo más llamativo fue cómo le comunicaron su salida: en medio de una estación de servicio.
“Fue un destrato sin dudas. Ni hablar, 100%», dijo Battaglia recordando aquel episodio de mediados de 2022 en diálogo con TyC Sports. «Yo tengo una historia en ese club, mucha historia. La voy a cuidar por siempre. Siempre quiero lo mejor para Boca y que la gente pueda disfrutar de cosas buenas. No me parece que sea la forma. El día que te quieren contratar es todo color de rosas, parece que somos todos rubios de ojos celestes y después te vas transformando. Hubiera estado bueno que sea de otra manera. Quedó a la vista de todos”, dijo Battaglia.
Battaglia y Riquelme
Seba tuvo un episodio con Riquelme cuando era DT, ya que el entonces vicepresidente obligó a todo el plantel a bajar del micro para una charla dentro del vestuario. «Yo no sabía, estaba en conferencia de prensa y me enteré después. Si estaban arriba del micro, él como jugador no se hubiese bajado. Yo me pongo en el lugar del otro cuando está en una función, pienso cómo reaccionaría. Quizás en caliente uno hace cosas de las que se arrepiente. Es la realidad. No estuvo bien porque tranquilamente pudo haberlo hecho al otro día”, dijo Battaglia.
“El felicitó al equipo por ese segundo tiempo que tuvo, no fue una charla mala, pero para el afuera queda raro. Me jodió, obviamente que sí. Al que no le jode es porque no tiene sangre. Cualquiera en esa situación hubiese sentido eso”, agregó Seba, que contó cómo es trabajar con Riquelme. «Como jefe es difícil, como compañero y jugador un fuera de serie. Difícil porque uno piensa de una manera, otro piensa de otra y hay que terminar de encarrilar todo. A veces tenemos que estar todos en una misma línea para que las cosas se puedan dar. Dirigentes, cuerpo técnico y jugadores”.
