En las últimas horas, los usuarios registraron que algunos participantes infringieron las reglas de Gran Hermano. En este sentido, «Big» arrancó el programa reuniendo a los participantes de la casa y anunciando que se venían sanciones. Posteriormente, el host, le confirmó a Joel y Nicolás serían sancionados por quitarse el micrófono en el programa.
En este aspecto, Gran Hermano expresó: «Hay solo tres instancias en las que tienen autorizados sacarse el micrófono. Una en el descanso, cuando se duchan y en el interior de la pileta. En cualquier otra instancia, el uso del micrófono es obligatorio. Incluso cuando van al baño si no se duchan. Como no respetan esa norma del juego, ya apliqué sanciones. Y quiero decirles que esta noche también habrá sanciones. Serán severas», comenzó.
Posteriormente, Gran Hermano reveló quienes rompieron las reglas: «Hoy observé que dos participantes interactuaron con compañeros y sin el micrófono colocado. Joel en la cocina y Nicolás en el baño. A esta altura de la competencia no lo puedo calificar como un olvido este tipo de faltas. No usarlo o taparse para que yo no escuche constituye transgresiones graves que no voy a dejar pasar», aseguró mientras ambos quedaban nominados.
Volvió el Teléfono Rojo a Gran Hermano
Cada vez que suena el Teléfono Rojo, se encienden todas las alarmas en los participantes de Gran Hermano. Puesto que, el aparato sonó nuevamente y ninguno se aventuró a atenderlo sin medir antes las consecuencias. Incluso, «Furia» se abstuvo de levantar el tubo y Martín obtuvo un beneficio. Puntualmente, «El Chino» pudo elegir qué compañero podía ir al final de la fila en el sorteo por la moto.
Posteriormente, Martín eligió a Catalina para ir de última en la fila por la motocicleta que sorteaba Gran Hermano. En este aspecto, «El Chino» expresó: «Estuvo todo el día diciendo que tenía ganas». Rápidamente, Cata respondió: «Estoy super feliz, en esta segunda edición que entré pude conocer mucho más a los hijos, nos llevamos super bien», aseguró.
