El Gobierno de Javier Milei anunció la definición de los productos que estarán exentos de impuestos adicionales al valor agregado (IVA), durante una reunión llevada a cabo en la sede de la Secretaría de Comercio. Esta medida, que abarca una amplia gama de alimentos, bebidas, artículos de higiene y cuidado personal, medicamentos, entre otros, busca aliviar el impacto de la inflación en el costo de vida de los ciudadanos y promover un diálogo con los sectores industriales involucrados.
La propuesta presentada por el Gobierno incluye alimentos como carnes, pescados, lácteos, frutas, verduras, cereales, entre otros, así como también productos de higiene personal, limpieza y medicamentos. Esta iniciativa parece estar dirigida a abordar la problemática de los precios altos en góndolas mediante la importación acelerada de productos básicos, en un esfuerzo por contener el aumento de los precios y garantizar el acceso a bienes esenciales para la población.
Además, el ministro de Economía, Luis Caputo, celebró los cambios en la estrategia de descuentos y promociones de algunos supermercados, destacando un movimiento hacia descuentos más claros para asegurar una mayor transparencia en los ajustes de precios. En lugar de promociones como «3×2» o «4×2», se están ofreciendo descuentos directos, lo que asegura una mayor transparencia en los ajustes de precios.
esta medida gubernamental representa un esfuerzo por mitigar el impacto de la inflación en el día a día de los argentinos y garantizar el acceso a productos esenciales a precios más asequibles. Al mismo tiempo, busca impulsar la actividad económica al establecer un diálogo con los sectores industriales y promover una mayor transparencia en los ajustes de precios en el mercado minorista.
Al disminuir la carga tributaria en estos elementos básicos, se espera que los precios al consumidor final también bajen, lo que podría aliviar la presión sobre los bolsillos de las familias y mejorar su capacidad adquisitiva. Esto, a su vez, podría estimular el consumo interno y contribuir a la reactivación económica, ya que los consumidores podrían gastar más en otros bienes y servicios, impulsando así la actividad comercial.
Además del beneficio económico para los consumidores, la reducción de impuestos en estos productos también podría tener un impacto positivo en la salud y el bienestar de la población. Al hacer que alimentos saludables, productos de higiene personal y medicamentos sean más accesibles y asequibles, se promueve un estilo de vida más saludable y se facilita el acceso a productos esenciales para el cuidado personal y la atención médica, lo que podría tener efectos positivos en la calidad de vida de la población en general.