El oficialismo logró la aprobación en general de la Ley de Bases en la Cámara de Diputados con un respaldo de 142 votos a favor, 106 en contra y 5 abstenciones. Esta aprobación se dio gracias al apoyo de la oposición dialoguista, marcando un hito en el proceso legislativo. Sin embargo, el debate continúa en el recinto mientras se definen los aspectos en particular del proyecto que incluyen temas como delegación de facultades del Congreso al presidente, Javier Milei; privatizaciones de empresas estatales; incentivos a las inversiones y el impuesto a las Ganancias.
Lo que sucedió fue que después de que se aprobara en general la Ley Bases en la Cámara de Diputados, la oposición intentó que se votaran artículos específicos del proyecto en lugar de discutirlo por capítulos. Sin embargo, el oficialismo detuvo este intento de la oposición, y el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, confirmó que se había llegado a un acuerdo en la labor parlamentaria para que la definición del proyecto fuera por capítulos.
En otras palabras, se acordó que el debate y la votación se realizarían considerando las secciones o capítulos del proyecto en su conjunto, en lugar de votar cada artículo de manera individual. Por ejemplo, si se vota para darle más facultades al presidente de la Nación, se decide por todas o por no otorgar ninguna.
Entre los aspectos clave que se debaten y que todavía no fueron votados son la delegación de facultades, las privatizaciones, los incentivos a las inversiones y la cuestión de Ganancias. Se espera que estos temas generen un intenso intercambio de opiniones y posiciones en el recinto, ya que implican puntos sensibles para diversos sectores políticos y sociales.
Lo bueno y lo malo de debatir el proyecto de Ley de Bases por capítulos
El acuerdo para definir el debate por capítulos muestra un esfuerzo por parte de los legisladores para mantener una discusión coherente y eficiente sobre la Ley Bases. Esto permitirá abordar los temas de manera integral, considerando su impacto global y evitando debates fragmentados que podrían dilatar el proceso legislativo. Sin embargo, la decisión de votar por capítulos también significa que cada aspecto del proyecto será sometido a un escrutinio detallado, lo que seguramente generará controversia y debate intenso en el recinto y en la opinión pública.
Estos aspectos, que abarcan desde la delegación de facultades hasta el tratamiento del impuesto a las Ganancias, son cruciales para la economía y el futuro del país, lo que hace que la atención y el escrutinio público sean aún más intensos.
