La liberación de precios emitida por el gobierno de Javier Milei ha causado estragos en el país, especialmente por los fuertes aumentos que han sufrido los servicios públicos. El ajuste también llegó a los trabajadores de la televisión, y es que uno de los integrantes de Mañanísima, el ciclo conducido por Carmen Barbieri para Canal Trece, recibió su factura de luz en pleno vivo y quedó en shock.
La situación se dio mientras conversaban sobre la economía del país con Damián Di Pace, cuando Carmen Barbieri vio el monto de la factura de luz que le llegó a Hugo Lescano, el especialista en lenguaje corporal. «Yo analizo los gestos de todo el mundo y ahora hay que mirar el mío: tengo cara de sorpresa. Tengo una casa americana de dos ambientes, una pieza, cocina y baño, y somos tres personas. El mes pasado pagué 50 mil y ahora me vino está locura. Es imposible esto. Es un desborde», expreso angustiado tras revelar que recibió un monto de 140 mil pesos.
Quien también se mostró preocupado fue Diego Ramos, que acotó: «A mi también me vino un montón, y yo soy de los que cuando salen de una habitación apago la luz. No sé que más hacer, desenchufar todo, no sé». «Esto no es todo, porque a partir de ahora se van a aumentar las tarifas por la variación inflacionaria. Por eso el mes que viene vas a pagar 154 mil pesos. Y faltan los aumentos de gas, de agua, y eso va a generar un aumento fuerte en las expensas para aquellos que viven en edificios», informó Damián Di Pace.
Carmen Barbieri se confesó
Carmen Barbieri generó una gran conmoción al referirse a la infidelidad de Santiago Bal con Ayelén Paleo, y es que su confesión sorprendió al mundo del espectáculo. «Me acuerdo que me fui, enojadísima, y me compré con su tarjeta de crédito, 3 carteras Louis Vuitton que no iba a usar jamás. Fue como venganza. Me separé y le gasté una fortuna. Sufrí, pensé en matarlo interiormente porque me lastimó mucho. Fue muy doloroso para mí todo lo que pasó», comenzó la conductora.
Sin embargo, Carmen Barbieri no dejó que la situación la abatiera y pudo recomponer su vínculo con Santiago Bal antes de su muerte: «Siempre le decía a Federico que, cuando estaba internado tan mal, ya a lo último, cada vez que abría los ojos, yo estaba ahí. Él me dijo que no me merecía todo lo que me hizo pero entendí que uno puede dejar de amar».
