Connect with us

Hola, qué estás buscando?

POLÍTICA

«Sindicalistas con síndrome de abstinencia»: el Gobierno salió contra la CGT por la confirmación del paro general

El subsecretario de Prensa, Javier Lanari, cuestionó la convocatoria a un paro general el 9 de mayo.

Javier Lanari

El subsecretario de Prensa de la Nación, Javier Lanari, apuntó contra la Confederación General del Trabajo (CGT) tras el anuncio del nuevo paro general y aseguró que son “sindicalistas con síndrome de abstinencia”. Este jueves, la central sindical decidió lanzar la medida tras las reuniones con el Gobierno nacional

“La CGT está decidida a que (Javier) Milei sea el Presidente con mayor cantidad de paros generales. Sindicalistas con síndrome de abstinencia. Hibernaron 4 años en el periodo de mayor empobrecimiento de los trabajadores. Es un gran honor!”, publicó el funcionario nacional en su cuenta de la red social X.

Lanari fue de los primeros en salir a cuestionar la medida de fuerza adoptada por los dirigentes sindicales, que se materializará el próximo 9 de mayo. El segundo paro contra la administración del presidente Javier Milei se anunció un día después de que la cúpula de la CGT fuera recibida en Casa Rosada por el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y el ministro del Interior, Guillermo Francos.

El anuncio oficial y la reunión con el Gobierno

Además de este nuevo llamado a movilización (el primer paro se concretó el 24 de enero a solo 45 días de la asunción del Presidente), el consejo directivo de la central obrera anunció la realización de un acto con movilización el próximo 1° de Mayo. El motivo es otro aniversario del Día del Trabajador. En CABA, la marcha será en Plaza de Mayo.

La decisión se tomó en la sede de la CGT de la calle Azopardo, en Ciudad de Buenos Aires. Se espera que, en los próximos minutos, alguno de los 30 dirigentes allí reunidos confirme explícitamente el paro y movilización nacional de la central gremial. Por el momento, la comisión directiva sigue en reunión, con bastante hermetismo para el afuera.

Previamente, los sindicatos y el Gobierno habían mantenido buenas negociaciones. La administración libertaria había concedido ciertas licencias, como la eliminación de las cuotas sindicales y la suspensión de multas y sanciones por bloqueos sindicales. Al contrario de lo que se podría suponer, fueron los sectores dialoguistas de la CGT quienes impusieron la agenda para el mes que viene.

Advertisement