No hay dudas de que Yanina Latorre no tiene pelos en la lengua, y es que sus primicias causan escalofríos entre los famosos. Pero el panelismo no es a lo único que se dedica la angelita más polémica: también le dedica parte de su vida a la contaduría. En 1994 se graduó en la Universidad de Belgrano como contadora pública nacional y licenciada en administración de empresas.
Yanina Latorre trabajaba como contadora antes de conocer a su marido, quien le cambió totalmente la vida. Aunque ahora se dedica al periodismo de espectáculos, todavía le dedica parte de su tiempo a su antigua profesión, y es que según contó en una reciente entrevista, reveló que aún conserva algunos clientes.
En una entrevista con Revista Gente, Yanina Latorre contó: “Es que no hubo una transición muy fuerte porque yo ya no trabajaba todo el día de contadora cuando empiezo en los medios. Yo laburaba full contadora cuando me casé, pero después a Diego lo venden a Europa y yo laburaba más para él, le hacía los contratos, era como su representante”.
«También tenía dos hijos, la crianza. Soy contadora pública, sí, pero sigo trabajando de eso sólo para mi familia. Soy la contadora de Diego, de Dieguito, de Lola y mía. Nunca, jamás en la vida y te juro, nunca en la vida me imaginé todo esto que me está pasando. Creo que estoy pasando el mejor momento de mi vida. Viste cuando estás grande y estás tranquila, hoy como estoy, está ok, no estoy anhelando nada más”, expresó una emocionada Yanina Latorre.
Yanina Latorre habló de su matrimonio
En Bondi, el nuevo streaming de Ángel de Brito y Beto Casella, Yanina Latorre le dijo a su marido: “En algún momento te quise, después se va transformando… Éramos felices cuando vivíamos afuera y viajábamos, ¿te das cuenta? La rutina es una mierda, arruina a la pareja. No tenemos solución ya, pero para mí no hay que cambiar de marido, porque todo se convierte en la misma mierda”.
Por su parte, Diego Latorre recordó cómo se conocieron: “Nosotros fuimos una pareja no muy normal. Nos conocimos, yo me enamoré furiosamente desde un primer momento, ella no y, sin estar del todo enamorada, se fue a vivir conmigo a Europa”. «Cuando les dije a mis amigas que había conocido a Diego Latorre creyeron que era Diego Torres. Les dije a las chicas que lo conocí, que me encantaba y me invitaron a tomar un té con los cupcakes, los sanguchitos de miga y pusieron de fondo Color esperanza. Yo les pregunté qué es eso y me contestan: ‘Tu novio’. Y no, mi novio es el 10 de Boca. Un embole les pareció. Era raro. Les pareció un poco grasa. No les pareció divertido”, contó Yanina.