No hay dudas de que Chiche Gelblung es uno de los periodistas políticos más reconocidos en la televisión argentina. Si hay algo que el comunicador no tiene miedo de hacer es decir lo que piensa, incluso cuando se trata del presidente. Si bien recientemente Javier Milei y el periodista se mostraban amigos, parece que las cosas han cambiado.
«La verdad es que hoy Milei no me atiende el teléfono. Se enojó con la última entrevista que le hice. No le gustó. Milei está acostumbrado a que todo el mundo le diga que sí. Yo tengo mucho respeto por la figura presidencial, pero soy periodista y a ningún presidente le dije que sí. Un periodista no puede ser amigo de un presidente», comenzó.
«Es un tipo que en el conflicto goza, en la adversidad se excita. Funciona con lo contrario que funciona la gente, cuando peor están las cosas, más excitado está él. Le divierte, goza con eso. No por una cuestión de perversión, él se siente ahí necesario. Es un tipo raro, diferente», continuó Chiche Gelblung, molesto con la actitud de Javier Milei.
En conversación con Cenital, Chiche Gelblung también acusó al presidente de contradecirse cuando dice estar en contra del Estado: «Un tipo que tiene una visión de poder, dice cosas como que el Estado es una organización criminal cuando además a él le gustan los Granaderos, el chofer, el Despacho. La banda no se la saca. Todo lo que tiene que ver con los símbolos del poder lo hacen feliz».
Javier Milei visitó a Chiche Gelblung
Previo a este conflicto, Javier Milei y Chiche Gelblung solían ser amigos. Si bien se habían distanciado, luego de la internación del periodista lograron redimir diferencias y volver a acercarse. El pasado noviembre el comunicador debió ser internado en el Sanatorio Mater Dei por una insuficiencia renal y contó con la visita del presidente.
En su momento, mientras se suponía que debía hacer reposo, Chiche Gelblung apareció en una conversación telefónica con Radio del Plata y contó todo sobre la visita de Javier Milei. Sobre su salud, razón por la que estuvo internado cinco días, el periodista contó: “Estoy en mi casa. Me bajaron unos valores que no tendrían que haber bajado y yo no le di bola”.
En cuanto a la visita del libertario, Chiche Gelblung se animó a contar cómo fue su conversación. «Fue muy sorpresivo. Se quedó como una hora charlando. Estábamos medios peleados. Una pavada, a mí no me gusta que me corrijan ciertas cosas, y hubo cosas que yo dije en cierto momento que no gustaron, pero no pasó nada grave», reveló.