La Unión Cívica Radical (UCR) vive una guerra de operaciones para definir a su candidato para ocupar una de las vacantes en la Auditoría General de la Nación (AGN) en representación de la Cámara de Diputados de la Nación. Al partido centenario le corresponde una de las sillas vacías, y ahora la balanza favorece a Mario Negri, un histórico del espacio, que supo ser diputado durante seis mandatos completos, siendo jefe de bloque durante una década entera.
Sin embargo, el actual presidente de la bancada, Rodrigo De Loredo, no lo quiere y alienta al exlegislador y su actual asesor de cabecera Alejandro Cacace. Tampoco está de acuerdo el gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, que propone a la diputada Pamela Verasay. El auditor general es un cargo que supone el acceso a información privilegiada y reservada, con un mandato que brinda una estabilidad de ocho años y, no menos importante, un sueldo suculento mayor a los $ 5 millones por mes.
Hasta ahora, asoma como ganador de esta carrera Negri, quien este miércoles recibió el aval en una carta rubricada por 22 de los 34 diputados nacionales de la UCR. Además tiene el respaldo del presidente de la bancada de Hacemos Coalición Federal, Miguel Ángel Pichetto, quien dejó la AGN para asumir su bancada de diputado nacional en diciembre último. Si bien Pichetto no conduce a todo su bloque, las voluntades que pueda arrimar a favor de Negri son claves en la elección.
La carta de apoyo a la postulación de Negri la firmó casi toda la UCR, excepto los afines a Cornejo y a De Loredo, consignó NA. Pusieron su rúbrica Carla Carrizo (CABA), Danya Tavela (Buenos Aires), Karina Banfi (Buenos Aires), Mariela Coletta (CABA), Marcela Antola (Entre Ríos), Melina Giorgi (Santa Fe), Fabio Quetglas (Buenos Aires), Pedro Galimberti (Entre Ríos) y Pablo Juliano (Buenos Aires).
También Jorge Rizzotti (Jujuy), Marcela Coli (La Pampa), Gerardo Cipolini (Chaco), Natalia Sarapura (Jujuy), Mario Barletta (Santa Fe), Facundo Manes (Buenos Aires), Julio Cobos (Mendoza), Fernando Carbajal (Formosa), Roxana Reyes (Santa Cruz), Juan Carlos Polini (Chaco), Atilio Benedetti (Entre Ríos), Roberto Sánchez (Tucumán) y Manuel Aguirre (Corrientes).
Además de Pichetto, la AGN debe resolver los reemplazantes del camporista Juan Ignacio Forlón y del massista Gabriel Mihura Estrada, quienes culminaron mandatos. Una de esas sillas le corresponde al oficialismo, aunque en este caso se acordó cederle el lugar al PRO, que juega en tándem con La Libertad Avanza en el Congreso de la Nación. El elegido es el exministro de Trabajo Jorge Triaca, quien le ganó la pulseada al apoderado de La Libertad Avanza Santiago Viola.
La última vacante es para Unión por la Patria, que todavía no definió a su representante. Esta coalición reclamaba dos lugares por tener 99 integrantes en la Cámara baja (el doble que La Libertad Avanza, PRO y UCR), pero el oficialismo y sus socios dialoguistas le reconocerán uno solo. No obstante, la presidencia de la AGN seguirá en manos de Unión por la Patria por ser la fuerza opositora con mayor representación en el Congreso nacional. Su actual titular es Juan Manuel Olmos.
Qué tarea tiene la Auditoría General de la Nación
La AGN tiene como tarea la realización de auditorías y estudios especiales asistiendo técnicamente al Congreso en el ejercicio del control externo del sector público nacional. También se encarga del control externo posterior de la gestión de la administración central, organismos descentralizados, empresas y sociedades del Estado.
En ese control también están incluidos entes reguladores de servicios públicos, instituciones de Seguridad Social, Fondos Fiduciarios integrados con bienes y fondos del Estado, organizaciones privadas que reciban subsidios o aportes del Estado e instituciones cuyos fondos o administración estén a cargo del Estado.
