Connect with us

Hola, qué estás buscando?

ESPECTÁCULO

«En la clínica, todo sangre»: preocupación en el espectáculo por lo que sucedió con Soledad Silveyra

Nadie puede creer lo que se confirmó.

Soledad Silveyra

No hay dudas de que Soledad Silveyra es una de las figuras más destacadas del mundo del espectáculo, y es que no solo es una excelente actriz, sino que además es sumamente querida por el público. Son su distintiva personalidad, su calidez y su honestidad a la hora de hablar de su vida privada las características que la hacen cercana a la gente.

Esta semana Soledad Silveyra estuvo como invitada en La Noche Perfecta, el ciclo conducido por Sebastián Wainraich para Canal Trece, y generó una gran repercusión con sus declaraciones. Y es que la artista sorprendió a los televidentes y al conductor al recordar una insólita anécdota que vivió con Sandro, con quien compartió varias películas.

«¿Es verdad que tenés una cicatriz por espiar a Sandro?», quiso saber Sebastián Wainraich. Tras enseñar la marca que tiene en la pantorrilla, Soledad Silveyra comenzó a relatar: «Él estaba comiendo con una señora. Yo la había visto entrar y me había parecido una persona muy fea». «Se opinaba de los cuerpos ajenos en ese momento», señaló el conductor.

«Bueno, para mí era muy fea. Yo decía ‘qué hace Roberto con una señora tan fea’. Entonces, me fui gateando por debajo de la mesa para tratar de ver la cara de Roberto. Esto fue en el comedor de Lumiton creo, un estudio que estaba en Munro. Yo iba gateando y de golpe veo que Roberto se gira», contó divertida Soledad Silveyra.

«Me quise esconder y me clavé un fierro que estaba salido. Me fui a la clínica, enchastré todo de sangre», reveló Soledad Silveyra entre risas. Frente al asombro de Sebastián Wainraich y de todos los presentes, la querida actriz cerró: «Un horror. Por supuesto, pegué un grito y empecé a decir: ‘Me lastimé, me lastimé’. Me tuvieron que coser».

Soledad Silveyra también recordó su paso como jurado del Bailando, donde no tuvo una muy buena experiencia. «El programa me gustaba, yo entré con muchas ganas. Yo tengo una teoría y es que, cada veinte años, hay que renovar las generaciones. Siempre algún programa popular me divierte hacer. Ahora no porque bueno, no hay», contó la actriz.

«Me metí en el jurado y, la verdad, es que no la pasé muy bien. Con Moria y con Nacha está todo bien igual, me saludo con las dos. Está todo perfecto pero me tenían de hija. A mí no me gusta el barro, pero bueno. Todo el tiempo eran agresiones. Yo a Moria ya le conocía su lengua karateka pero a Nacha no. La respeto muchísimo y lo de ella me dolió», expresó Soledad Silveyra.