No hay dudas de que Soledad Silveyra es una de las actrices más queridas del mundo del espectáculo, y es que no solo es sumamente profesional en lo que hace, sino que además es transparente con el público a la hora de hablar de su vida privada. Así sucedió en una reciente entrevista, en la que la actriz habló de su pasado amoroso.
Invitada a Ángel Responde, el ciclo de streaming que Ángel de Brito conduce para Bondi Live, Soledad Silveyra se abrió como nunca sobre su relación con Chacho Álvarez. Aunque para muchos se trató de una apasionada historia de amor, para la actriz el romance con el político fue un «calvario» y un «episodio doloroso y complejo».
“Es el único de los hombres que tuve, que no fueron tantos, con el que no pude quedar bien, con un vínculo más allá de lo amoroso», contó Soledad Silveyra sobre por qué no pudo mantener su amistad con el Chacho Álvarez. Aunque la actriz describió al ex vicepresidente de Fernando de la Rúa como «honesto», también aseguró que era un «psicópata».
“Sufría porque era un poco psicópata. Siempre encontraba algo; una bombachita, un corpiñito, un pincel… y tenía unas hijas maravillosas que lo cubrían. Con él me retiré. Dije ‘basta, no quiero sufrir más’. Era un infiel. Me la tragué de que había dejado a su novia. ¿Quién no ha sido cornuda alguna vez?”, le dijo Soledad Silveyra a Ángel de Brito.
Soledad Silveyra y su nuevo amor
Recientemente Soledad Silveyra inició un romance con un hombre que conoció en Buzios, Brasil, José Luis Vázquez. Invitada a la mesa de Mirtha Legrand, la actrizcontó: “Conocí un hombre encantador que vive en Brasil pero es argentino. Vive en Buzios. Estaba ahí y me habían recomendado dos amigos, y me mandan tipo encomienda».
«Ellos saben que yo pierdo todo, que soy un desastre, dejo todo en cualquier lado, pierdo carteras, pierdo todo. Y me encomiendan… ‘si les pasa algo, estén atentos, llaman a tres o cuatro contactos’.Uno de esos contactos me llama al día siguiente y me invita a almorzar. Fui a almorzar, y no había hombre que me gustara», relató Soledad Silveyra.
«Yo estaba filmando la bahía y me dicen ‘Solita’, entonces me doy vuelta y digo ‘ah…, mirá vos’. Y empezamos a conversar y durante ocho días hablamos no sé… diez horas por día. Nos pasamos conversando. Me decía ‘venite a la posada’ y yo ‘no, no’. Estaba peor que una chica de 15 años, nerviosa… Bueno, el último día entré a la posada…”, agregó Solita.
