Una exitegrante del programa de Marcelo Tinelli decidió romper el silencio en vísperas del lanzamiento del “Cantando”. Se trata de Soledad Silveyra, quien habló de su participación en el programa y sacó los trapitos al sol.
Al contrario de lo que muchos pensaban, el paso de la actriz por el jurado del reality no fue una experiencia divertida. “Tres años fui jurado del Bailando, me gustaba el programa e iba con muchas ganas. Yo creo que cada 20 hay que ir renovando las generaciones, siempre me divierte hacer un programa popular”, expresó en una entrevista con Canal Trece.
Y añadió: “La verdad no la pasé muy bien, con Moria y con Nacha, que hoy me saludo, con las dos y está todo perfecto, pero me tenían de hija mal». «No me gusta el barro, todo el tiempo eran agresiones. A Moria la conocía por lengua karateca, pero me dolió muchísimo lo de Nacha”, expresó la colega de Marcelo Tinelli.
Soledad Silveyra habló de su salud
«Lo que pasa es que yo estoy con un problema con el nervio Arnold, que hoy me tiene tranquila, él viene y me pasan los dolores», le contó la actriz al conductor. Sin tapujos, Solita reveló lo que siente verdaderamente: «La verdad estoy preocupada, tuve que decir que no a una compañía en el Uruguay, me gustaba mucho la idea, la verdad es que estaba muy dolorida».
«Ese nervio me afecta una puntada que es mortal, estuve muy atacada hace veinte días», relató la famosa sobre su estado. «Cuando volví de Italia, no volví bien. En el viaje nos peleamos como locos, porque hay que hacer un viaje así», reveló la famosa a continuación.
En torno a su nuevo vínculo amoroso, Soledad Silveyra comentó: «Los dos tuvimos unas vidas bastante duras, teníamos mucho de qué hablar, pasaron nueve días. Era una niña de quince años, yo hace más de diez años que no tenía algo con un hombre. Yo amo la vida, yo ahora estoy en una crisis artística y ya vendrá. Tengo dos obras que me han ofrecido».
«Estoy muy bien, tengo un nuevo amor. Hace doce años que no entraba un hombre nuevo a mi vida, es como que yo fui abuela y… Nunca es tarde, no hay que hacer lo que hice yo que me cerré después de una muy mala experiencia amorosa y me refugié en mis nietas y nietos».
