La Organización de los Estados Americanos (OEA) condenó la detención del gendarme argentino Nahuel Gallo en Venezuela. Esta detención se dio a comienzos de diciembre por parte del gobierno del mandatario Nicolás Maduro.
El secretario general de la OEA, Luis Almagro, compartió un duro mensaje. En él consideró que la detención de Nahuel Gallo es «arbitraria». La detención viola «las normas internacionales y de los principios fundamentales de humanidad y justicia que todos los Estados deben respetar».
«La Secretaría General de la Organización de los Estados Americanos (OEA) repudia y condena la detención arbitraria por parte del régimen de Venezuela del agente de la Gendarmería Nacional Argentina, Nahuel Gallo», comienza el comunicado.
En el comunicado, la Secretaría declaró que el accionar del gobierno de Venezuela es antidemocrático. «El caso del gendarme Gallo constituye un crimen de lesa humanidad según el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional», señala.
Y agrega que esta detención, «es una clara violación de normas internacionales y de los principios fundamentales de humanidad y justicia que todos los Estados deben respetar». Al mismo tiempo, explican las causas de tal afirmación.
Al respecto, señalan: «La incomunicación y la negación de asistencia consular y legal representan una violación directa de la Convención de Viena sobre Relaciones Consulares». Además, «estos hechos son una prueba más de la violación sistemática de los derechos humanos fundamentales por parte del régimen venezolano.»
La demanda de la OEA
Luego de la declaración de la CIDH, el gobierno de Nicolás Maduro publicó imágenes del gendarme argentino. En ellas puede verse a Nahuel Gallo en el patio de la cárcel en la que se encuentra alojado.
En este comunicado, la Organización de los Estados Americanos plantó una exigencia hacia Venezuela. En ella solicitó que el «régimen de Venezuela cumpla con los tratados y acuerdos internacionales sobre derechos humanos y relaciones internacionales». Luego, le exigió que «certifique y garantice» la seguridad física del argentino.
Finalmente, el comunicado agregó un pedido. En este, se le demanda al gobierno de Nicolás Maduro la provisión de garantías de asistencia legal y contacto con su familia «y que libere inmediatamente a Nahuel Gallo».
La exigencia de la Corte Internacional de Derechos Humanos
La CIDH entiende que la situación reviste la gravedad, urgencia e irreparabilidad y, de acuerdo al artículo 25 de su Reglamento, le exige a Venezuela que:
- Adopte las medidas necesarias para proteger los derechos a la vida e integridad personal de la persona beneficiaria.
- Informe si la persona beneficiaria se encuentra bajo custodia del Estado y las circunstancias de su detención; o bien, de las medidas tomadas a fin de determinar su paradero o destino.
- Precise si la persona beneficiaria fue presentada a un tribunal competente para revisar su detención de habérsele imputado delitos.
- Indique de manera expresa el tribunal que conocería su causa penal, de existir esta, o las razones por las que no ha sido puesta en libertad a la fecha.
- Permita la comunicación del beneficiario con su familia y representantes legales de confianza, dándoles acceso pleno a su expediente penal, de existir.
- Posibilite que tenga comunicación con el país del que es nacional.
- Informe sobre las acciones adoptadas a fin de investigar los presuntos hechos que dieron lugar a la presente medida cautelar y así evitar su repetición.