Boca tuvo un duro golpe en Rosario, donde cayó ante Newell´s por 2 a 0, aunque peor fue el rendimiento del equipo de Fernando Gago. El entrenador volvió a ser cuestionado por el funcionamiento, pero también por sus decisiones. Y hasta por sus declaraciones, como apuntó Martín Arévalo e indica Somos Boca.
«Fueron varios pasitos para atrás. El equipo había ganado seis partidos consecutivos desde la derrota con Racing y tres desde la eliminación con Alianza Lima. El equipo venía en levantaba, empezaba a querer funcionar. Y ayer todo lo que había avanzado parece que se le olvidó», dijo Arévalo, periodista que sigue el día a día de Boca en Radio La Red.
«No solo jugó menos concentrado que Newell´s, sino que el rival jugó como una final. No sé si como saben que entran seguro en octavos de final entraron relajados. Jugaron mal en defensa, muy mal en creatividad y lucidez a la hora de habilitar a los delanteros. Y mal en el área, fue un combo», agregó Arévalo.
«Newell´s lo ganó bien. Es cierto que hubo mala suerte en la jugada del penal, pero también ligó con dos palos consecutivos en el arranque del segundo tiempo y no sé cómo terminaba la historia», sumó el periodista, que hizo referencia a una frase de Gago que cala hondo en los jugadores de Boca.
«En la conferencia de prensa, Gago dijo una frase llamativa. Que no sabe explicar por qué jugaron mal. Seguramente la tiene que encontrar para hablar con el plantel. No para decírselo a la gente. Todo lo que se había mejorado quedó en el olvido», disparó Arévalo.
Además, el periodista fue crítico con la decisión de jugar el partido tras la agresión que sufrió Leandro Brey antes del inicio. «No puede pasar lo que se vivió en la previa. Ayer terminó un jugador con el cuello cortado. Un vidrio de punta que cayó en el área. El partido se jugó porque se jugó, si no se trata de puntería», apuntó.
Qué dijo Gago
«No me voy preocupado», dijo Gago en conferencia de prensa. «Fue un partido muy malo, donde no encontramos situaciones para atacar la rival. Tampoco creo que sea un retroceso de cinco casilleros, es un partido. Ni antes éramos tan buenos ni ahora somos tan malos”, agregó el entrenador de Boca.