Muy fuerte fue lo que se escuchó en TN en las últimas horas, y tiene que ver con José Bianco. Tras el devastador temporal que tuvo lugar en Bahía Blanca, en el que hubo más de 1300 evacuados y una decena de fallecidos, el reconocido meteorólogo blanqueó su preocupación por su familia, que reside en dicha localidad.
«La verdad es que es una situación muy pero muy compleja. Vos tenés mucha familia allá”, señaló en primer lugar Franco Mercuriali, conductor del noticiero. Fue entonces que José Biano se animó a dar a conocer su situación: “Todavía no pude hablar con mis papás… me enteré que pudieron comunicarse telefónicamente con uno de mis hermanos”.
En cuanto a si su familia se encuentra bien, José Bianco manifestó: “Sí, pero me empiezan a llegar comentarios de hermanos y amigos que tuvieron que ser rescatados en kayak. Entonces te das cuenta que los helicópteros salvan vidas en estos casos. No se salvó nadie, todos tuvieron agua hasta la rodilla mínimo en la casa”.
“No sé dónde están mis papás. Estoy intentando comunicarme con ellos continuamente, con mis familiares. De hecho en el grupo de la familia hace 4 horas que mandé preguntando cómo estaban y no responde nadie… así que si están bien por favor díganlo, si me quieren tranquilizar”, comentó visiblemente angustiado.
“Es grave, porque esto de los muertos que empezó a hablarse después del mediodía, son los pasos lógicos que te dan magnitud del caos. Porque al principio, cuando es algo puntual, aparece la noticia de las personas que murieron al instante… y ahora hay lugares a los que todavía no llegaron”, sentenció José Bianco.
Consternación por lo que dio a conocer José Bianco
Muy fuerte fue lo que dio a conocer José Bianco delante de los televidentes de TN: «Intenté barrenar una ola sin tabla en la zona de Pinamar un día después de haber habido mucho viento, estaba revuelto el mar. Le quise enseñar a mi compañero, dos grandulones. Cuando veo que venía una ola grande me tiro, como rompía tan rápido los pies quedaron arriba y la cabeza abajo».
«Atiné a ponerme firme, caí mal, puse las manos pero golpeé el rostro contra el fondo del mar. Quedé sin movimiento en la pierna y en los brazos. Ese día hubo cuatro episodios en el mar. Rápidamente los guardavidas me inmovilizaron y me llevaron a la camilla. No me podía mover. Me subieron a la ambulancia, estuve tres días en terapia», relató.
