El senador nacional de la UCR, Martín Lousteau, analizó este domingo en Radio 10 las últimas decisiones del Gobierno en materia económica, con foco en la posible del cepo cambiario, el nuevo préstamo del FMI y el impacto de una eventual devaluación. El legislador fue crítico con la narrativa oficial y advirtió que el Ejecutivo se vio forzado a recurrir a organismos internacionales por la falta de divisas propias.
“Lo que le pasa al Gobierno es que, pese a la puesta en escena de que todo marcha de acuerdo al plan, lo que le advirtieron los economistas, se quedó sin dólares”, sostuvo Martín Lousteau.
Según el economista y referente radical, la gestión de Javier Milei recurrió a diversos mecanismos para cubrir esa carencia: “Entonces fue a alquilar dólares al FMI, al BID y alquilar dólares con el swap de China. Salió a alquilar dólares por un tiempo, más largo y en otros más corto”.
Martín Lousteau definió la medida como una devaluación
Martín Lousteau también habló sobre el efecto que tendría una eventual modificación del tipo de cambio oficial: “Es una devaluación, vamos a ver a dónde va. Si el dólar está $1200 también es una devaluación. Eso va a afectar precios y actividad económica en el largo plazo”.
En esa línea, trazó un paralelismo con la situación vivida en 2024: “Este es el combo igual al del año pasado, donde a algunos les va muy bien y otros ven que no hay zozobra cotidiana porque ahora te prestan dólares”.
También apuntó contra la retórica oficialista: “Si te metiste en el mar y después tuviste que llamar al guardavidas quiere decir que no pudiste salir solo, que hay un problema. Faltó que reconozcan que hay un problema. Con este préstamo ni siquiera se resuelve de manera definitiva”.
Por último, resumió la secuencia que llevó a esta nueva fase del plan económico: “El Gobierno se encerró en un lugar durante mucho tiempo de pisar el dólar. En un momento cayeron las reservas y encontró la solución que tenía a mano: una devaluación y ayuda del FMI”.
Las palabras de Martín Lousteau reflejan la preocupación opositora sobre la sustentabilidad del modelo económico actual, y marcan un contrapunto con el discurso oficial que insiste en que la estabilización está en marcha.