Sebastián Coates, defensor uruguayo y actual capitán de Nacional, fue claro al hablar de los futbolistas que más lo exigieron a lo largo de su carrera. El zaguero con paso por el Liverpool, el Sporting Lisboa y la Selección de Uruguay, dejó en segundo plano a sus compatriotas Luis Suárez y Edinson Cavani, y centró su análisis en los dos gigantes del fútbol mundial: Lionel Messi y Cristiano Ronaldo.
Consultado por los rivales más difíciles de marcar, Coates explicó que el portugués y el argentino fueron desafíos totalmente distintos. “Cristiano es más delantero, era estar atento a sus movimientos, a su potencia en el área”, describió. Sin embargo, al referirse al capitán de la Selección Argentina, fue contundente: “Messi te venía de atrás, en carrera, y eso era mucho más complicado”.
La diferencia que remarcó Coates tiene que ver con el estilo de juego de ambos cracks. Mientras que Cristiano se posiciona como un definidor implacable, Messi sorprende con su capacidad de creación, cambio de ritmo y lectura del juego. Esa capacidad de desestabilizar desde cualquier sector del campo es, según el defensor, lo que lo convierte en un rival aún más difícil.
“Suárez y Cavani eran imbancables… en los entrenamientos”
Más allá de sus enfrentamientos con las grandes figuras del fútbol mundial, el ex Liverpool también destacó lo que vivió dentro del entorno celeste. “Siempre pongo a Luis y Edi entre los más complicados, porque me tocó marcarlos en entrenamientos y eran imbancables”, contó en una entrevista con Conmebol. El zaguero compartió plantel con ambos durante más de una década en la Selección de Uruguay, desde su debut en 2011 hasta 2023.
Si bien tanto Suárez como Cavani hoy están alejados de la “Celeste” por diferencias con el entrenador Marcelo Bielsa, el recuerdo de lo que fueron sigue intacto. Su influencia dentro y fuera de la cancha fue clave en una era que marcó un antes y un después para el fútbol uruguayo.
La admiración de Coates por sus excompañeros y por los íconos como Messi y Cristiano deja en evidencia lo privilegiado de su recorrido, enfrentando y compartiendo vestuario con algunos de los nombres más grandes de este siglo. Una voz más que autorizada en el debate eterno.
