El argentino Franco Colapinto regresó a la Fórmula 1 siendo titular y compañero dentro del equipo Alpine de Pierre Gasly. La primera experiencia de Franco en Imola fue una montaña rusa. Desde el inicio el argentino estuvo bajo la lupa de todo el mundo. Cada momento era un instante decisivo ya que al reemplazar a Jack Doohan todos querían saber si Franco estaba a la altura de las circunstancias. Fue un sube y baja permanente. Más allá de esa presión Franco pudo demostrar que podía enfrentar esa presión y el viernes cerró una jornada positiva en su trabajo progresando mucho y pudiendo conocer el auto y los nuevos neumáticos que llevó el proveedor de la Fórmula 1.
El sábado todo cambió. La tercera sesión de ensayos pasó sin mayores novedades y la clasificación tuvo un momento destacado cuando Franco Colapinto se aseguraba el paso a la Q2 pero abría un último intento de vuelta rápida que terminó contra el muro de contención rompiendo mucho la parte delantera de su A525. Entonces los fantasmas comenzaron a sobrevolar por el box de la escuadra francesa. Casi al instante empezaron a aparecer los rumores y los cuestionamientos. Todos apuntando a la capacidad de Franco Colapinto.
Durante gran parte del fin de semana y con efecto retroactivo a la semana previa, circuló un rumor sobre la contratación de Franco. Muchos decían que existía una condición que obligaba al argentino a correr cinco carreras y luego se haría una evaluación para determinar si Franco Colapinto estaba capacitado para seguir en Alpine. El propio Flavio Briatore se encargó de borrar ese rumor y dejar en claro que el proyecto Colapinto cuenta con un gran respaldo y no se han puesto tiempos para el desarrollo del argentino en Alpine.
«Esto no se trata de dar a un piloto tres o cinco carreras. Esperaba más de Jack Doohan; quizá necesite un descanso», afirmó Briatore en una entrevista a los medios europeos que llenaron el circuito italiano de Imola en Emilia Romagna. Flavio habló con la prensa y fue abordado sobre los tiempos que teóricamente le habrían impuesto a Colapinto para estar en Alpine. El propio empresario italiano fue quien tuvo que salir a desmentir estos rumores y dejar en claro cual es la postura y la política que lleva adelante el equipo francés.
“Franco competirá tantas carreras como sea necesario. Leí en algún lugar que tendría solo cinco carreras, pero no existe un límite establecido. Solo le pido tres cosas: que sea rápido, que evite accidentes y que sume puntos. Si cumple bien con esto, estará al volante para siempre», disparó Briatore con una clara contundencia que suele determinar al italiano cada vez que desea aclara y establecer las pautas con las que trabaja. Es verdad que Franco en Imola fue rápido, no sumo puntos y se golpeó el sábado y por eso rápidamente aparecieron los murmullos nuevamente.
El equipo Alpine dejó atrás días de grandes turbulencias. La designación de Franco Colapinto en lugar de Jack Doohan para empezar. Luego vino la renuncia del jefe de equipo y mano derecha de Flavio Briatore Oliver Oakes y todo cuando ya estaba en marcha el operativo para enfrentar la competencia de Imola. Ahora la escudería debe fijar sus objetivos para Mónaco, sede de la próxima fecha del campeonato en apenas un puñado de días. Casi sin tiempo para dejar atrás Imola y ponerse a pensar firmemente en el difícil trazado callejero del principado de Mónaco, una de las citas más importantes de la temporada.