No hay dudas de que Intrusos, el ciclo conducido por Rodrigo Lussich y Adrián Pallares para América TV, es uno de los programas más destacados de la pantalla chica. No solo sorprenden semana a semana con las más impactantes primicias de lo que sucede en el mundo del espectáculo, sino que además tienen toda la información de la farándula.
En esta oportunidad fue Analía Franchín quien sorprendió a sus colegas con una fuerte información, la cual se da en medio del escandaloso juicio por la muerte de Diego Armando Maradona. Invitada a Intrusos por el aniversario número 25 del programa, la periodista recordó cómo veía al astro del fútbol antes de su fallecimiento.
“La verdad que cuando vi la foto que se viralizó de él en su lecho de muerte me pareció tremendo, aunque siempre pensé que lamentablemente iba a terminar así. Era una persona absolutamente inmanejable, yo no me animó a decir si alguien tuvo culpa o no. Creo que el primer culpable fue él como paciente, un paciente inmanejable, también para su familia”, señaló.
«Para la familia de un adicto es difícil acompañar. Si no acompañas es muy difícil señalar a otro y decir ‘no te ocupaste’. Yo si te tengo que ser honesta, creo que el juicio va a quedar en la nada», apuntó Analía Franchín. En medio de un momento tan difícil, la periodista dejó en claro que para ella no hay culpables detrás del fallecimiento de Maradona.
Analía Franchín se sinceró
En una reciente entrevista, Analía Franchín se animó a dar a conocer la historia de su querida hermana: «Ella tuvo una historia muy triste, su papá, que es el papá de mi otra hermana Marisa, la dejó cuando era muy chiquita, tenía 5 años, y vio como su papá se iba con otra señora y se desesperó. Fue muy traumático».
«Yo siempre tuve una cosa, fui como la que más unión tuvo con ella, porque yo nunca la juzgué. Yo siempre entendí. Obvio, la retaba, la puteaba, pero siempre entendí que claramente estaba enferma, que nadie elige estar. Cuando la gente te dice ´Ay, no, bueno, no es lo mismo uno que tiene una enfermedad clínica a un adicto porque el adicto eligió era drogarse´. Nadie elige drogarse», señaló.
«Yo le he visto a mi hermana, violada, quemada con cigarrillos, tirada en una zanja. La he ido a buscar una vez que hacía mucho tiempo que no aparecía y yo no podía vivir tranquila pensando que no sabía dónde estaba mi hermana. Era un invierno tremendo, muy crudo. Fui con una amiga de ella, me metí en la Villa 1-11-14, la del Bajo Flores. La encontré con una bombacha, la parte de arriba sin nada, comiendo una pata de pollo cruda, o sea, ese nivel. Pesando 30 y pico de kilos», recordó.
