El encuentro entre Boca e Independiente por los cuartos de final de la Copa de la Liga significaba mucho más para Boca desde lo anímico y emocional más allá de las posibilidades de avanzar a semifinales del Torneo Apertura. Para el presidente Juan Román Riquelme era necesario un triunfo que le diera aire en el cargo. Una derrota lo dejaba en el ojo de la tormenta como ocurrió y todo es negro en el Mundo Boca.
Tras conocerse la derrota por 1 a 0 ante el rojo de Avellaneda por el gol marcado por Álvaro Angulo a los 18 minutos del complemento. La Bombonera fue un hervidero ante los jugadores y el Consejo de Futbol con insultos y reclamos de renuncia principalmente para el presidente Juan Román Riquelme que fue captado por las cámaras con su habitual mate.
El mandatario, aturdido con los reproches del hincha de Boca no encuentra respuestas en lo institucional y mucho menos en lo futbolístico donde falló con los refuerzos, el ego y las elecciones del entrenador donde impuso siempre su mirada por encima de la opinión del propio entrenador de turno.
Juan Román Riquelme acorralado a la espera de resultados positivos
De acá en adelante, al ídolo de Boca Juan Román Riquelme no le queda otro camino que dejar de lado su ego, bajar una marcha en sus ideales y realizar una fuerte autocritica puertas para adentro a la hora de elegir refuerzos y entrenadores.
Tendrá que tener la cordura necesaria para dejarlos trabajar con libertad y tiempo. Sin embargo, el mismo no tiene tiempo en Boca e hilo en el carretel de sobra a cuasa de que está tenso con el hincha xeneize a punto de estallar por sus malas decisiones como dirigente. Agotó el margen de error y una nueva falla en lo futbolístico en este 2025 lo dejará fuera de Boca en las siguientes elecciones sea quien sea su contrincante.
Por su parte, en el portal el crack deportivo el periodista Damian Rancez dejó en claro que “Juan Román Riquelme ningunea a los técnicos. Piensa que son títeres de él y no terminan decidiendo nada. Riquelme se quedó en el tiempo, el futbol ha cambiado y hoy Boca lo agarró la ola de frente y no para de caer”.
Por último, cerró duramente con su análisis diciendo que “Tenga autocrítica y deje de hundir a Boca. A causa de que es una maquina de fracasar. Hoy en día tiene un ADN perdedor. Los partidos importantes tienen una alta posibilidad de perderlos. Esto lograron los que están hoy en la institución” cerró.