Cuando Miguel Ángel Russo arribó a Boca en 2020, agarró al equipo peleando la Superliga mano a mano con River. Había quedado prácticamente todo el plantel que tenía Gustavo Alfaro sumado a los refuerzos de ese entonces que fueron Guillermo “Pol” Fernández y Carlos Zambrano. Actualmente, está por comenzar un nuevo mercado de pases y serán al menos tres los nombres -uno por línea- que el club boquense buscará contratar pensando en el Mundial de Clubes, que se desarrollará a mediados de junio en los Estados Unidos.
De atrás hacia adelante, en su etapa anterior supo tener a Carlos Izquierdoz y al marcador central peruano, Lisandro López y Junior Alonso. Frank Fabra era indiscutible en el lateral izquierdo y hoy es Lautaro Blanco. Por derecha estaba Julio Buffarini y en el presente actúa Luis Advíncula o Lucas Blondel. En el mediocampo, “Pol” era el amo y señor hace cinco años mientras que ahora ese puesto es de Milton Delgado, joven promesa del elenco.
En la delantera, supo sacar el mejor nivel de Eduardo Salvio y Sebastián Villa, extremos claves para ganar el título local. Tuvo a Wanchope Ábila en buen nivel junto a Carlos Tevez. Los paralelos que podrían trazarse hoy, aunque sin consagraciones, son Kevin Zenón, Miguel Merentiel o Milton Giménez, las cartas de gol que tiene el “Xeneize”.
En la etapa anterior del experimentado entrenador de 69 años, el “Apache” era el capitán y máxima figura del equipo con la “10” en la espalda. Por detrás en cuanto a liderazgo estaban Izquierdoz, Fabra y Ábila en menor medida.
Ahora, Edinson Cavani lleva la cinta, aunque por sus constantes ausencias mayormente es Marcos Rojo quien la porta. En materia de referentes también están Advíncula, Merentiel y empieza a tomar protagonismo también Agustín Marchesín.
En 2020, el conjunto azul y oro venía de ser semifinalista de la última Copa Libertadores y ganar la Supercopa Argentina frente a Rosario Central. En 2019 con Alfaro hubo una transición con varios ciclos que terminaron y un estilo de juego algo defensivo. En siete partidos, Russo le arrebató el título local al “Millonario”y empezó a devolverle la sonrisa al cuadro de la Ribera.