El fútbol argentino ha despertado pasiones en todo el continente, y uno de sus más grandes admiradores es Carlos Valderrama, emblema de la Selección Colombia en los años 90. Su conexión con el país va mucho más allá de la admiración por Diego Maradona: alguna vez incluso estuvo a punto de vestir la camiseta de un club nacional. Sin embargo, fue su última declaración la que dejó a todos con la boca abierta: cuando le preguntaron por el mejor equipo del país, no eligió ni a Boca ni a River.
Durante una entrevista reciente con Goal, en la que debía seleccionar al mejor club de cada país, el “Pibe” optó sin dudar por Independiente. Su respuesta sorprendió incluso más que otras elecciones llamativas que hizo para potencias futbolísticas como España, Francia, Alemania o Italia. En el caso argentino, su respuesta fue tan directa como rotunda: “Independiente”.
Un amor que nació en tiempos de Bochini y Bertoni
La simpatía de Valderrama por el Rojo de Avellaneda no es nueva, ni mucho menos caprichosa. El colombiano ya había explicado en otras entrevistas cómo nació ese vínculo. “Tengo admiración por Independiente desde la época de Bochini y Bertoni. Hemos seguido al fútbol argentino desde hace mucho tiempo”, aseguró en diálogo con Super Mitre Deportivo.
Además, confesó que alguna vez quiso jugar en Independiente, pero un compromiso ya asumido con la MLS se lo impidió. Incluso llegó a recibir una camiseta del club que todavía conserva con cariño: “Siempre la uso. A la gente del Rojo le gustó eso”, reveló. Su respeto por la historia del club, en especial por aquellos tiempos gloriosos, parece haber dejado una huella profunda en su corazón.
Su fallido pase a Newell’s y una salida digna de leyenda
A pesar de que nunca llegó a jugar oficialmente en el país, Valderrama estuvo cerca. En 1995, posó con la camiseta de Newell’s, pero la historia terminó abruptamente. En una cena con Eduardo López, entonces presidente del club rosarino, el colombiano preguntó por el dinero acordado. Al recibir como respuesta que debían esperar una venta para pagarle, reaccionó con firmeza: “¿Yo qué tengo que ver con Scoponi? ¿Nosotros no llegamos a un acuerdo? Yo no espero ni a mi mamá ni a mi papá. Sean serios”, fue su contundente frase antes de dejar Rosario para siempre.
Ese gesto no solo reafirmó su carácter, sino que también mostró cómo su experiencia con el fútbol argentino fue corta, pero intensa. A pesar de esa decepción, su respeto por el talento y la mística de clubes como Independiente nunca se diluyó.
Independiente, el elegido por encima de los gigantes
La elección de Valderrama cobra aún más fuerza si se considera el contexto. Boca y River, los clubes más ganadores y populares del país, participarán este año en el nuevo Mundial de Clubes, pero ninguno fue mencionado por el exfutbolista. Él eligió al club que ganó siete Copas Libertadores y que durante décadas fue sinónimo de elegancia y copas internacionales.
Valderrama no necesitó grandes discursos para explicar su voto. A veces, el fútbol habla solo con los recuerdos y la camiseta que uno guarda en el armario. Y en el suyo, brilla la del Rojo.