El 18 de junio de 1995, hace exactamente 30 años, Boca derrotó 4-2 a River en el Monumental por la fecha 18 del Torneo Clausura, y el gol más recordado de aquella noche fue el de Alphonse Tchami, delantero camerunés que había llegado al club boquense meses antes y hasta el día de hoy es el único africano en haber marcado en un Superclásico.
El centro delantero nacido en Batouri, Camerún, arribó al “Xeneize” en febrero de esa temporada proveniente del Odense Boldklub de Dinamarca, donde había marcado 21 tantos en 67 partidos además de gritar campeón de la Dbu Pokalen 1992/93, la copa nacional del país europeo. Además, formó parte de la lista de 23 convocados que disputó el Mundial de Estados Unidos 1994.
El atacante debutó en la victoria por 2-0 ante Banfield, y su paso por el conjunto azul y oro dejó un saldo de 11 conquistas en 50 encuentros presenciados, siendo el más recordado de todos aquel 3-1 parcial ante el “Millonario”. A los 40 minutos del segundo tiempo, Rodolfo Arruabarruena metió un cambio de frente que dejó al camerunés cara a cara con Germán Burgos.
El goleador controló la pelota, miró al arquero y sacó un derechazo que se clavó en el ángulo izquierdo del arco local. Después llegaría el 4-1 de Rubén Da Silva y Enzo Francescoli anotó el 4-2 final desde el punto penal.
El nacido en África estuvo en el cuadro de la Ribera hasta junio de 1997 y compartió plantel con Diego Armando Maradona, Claudio Caniggia y Alberto Márcico, entre tantas figuras, pero al estar relegado en la consideración se marchó al Hertha Berlin de Alemania a cambio de 1.100.000 de dólares.
A partir de ahí, su carrera tuvo vaivenes y pasó por clubes exóticos de todo tipo. Al Wasl FC de Emiratos Árabes, Dundee United de Escocia, Niza de Francia, Chernomorets Odessa de Ucrania, Shenyang Ginde de China y Al Nejmeh Beirut de Líbano fueron sus equipos hasta llegar a RC Épernay Champagne en 2003, y tras dos campañas en el elenco francés le puso punto final a su etapa como futbolista profesional.