Fernando Gayoso se ha ganado el cariño de todos los trabajadores, así como también de los hinchas del Club Atlético Boca Juniors. El exentrenador de arqueros de la Primera fue uno de los grandes responsables de que el equipo haya salido victorioso de numerosas tandas de penales en el último tiempo, dejando en claro que su trabajo dio muchísimo que hablar.
Sin embargo, hace tiempo tuvo que dejar de trabajar en el día a día del cuadro Xeneize, debido a que le diagnosticaron ELA (Esclerosis Lateral Amiotrófica), por lo que tuvo que priorizar su estado de salud. Hoy, a sus 54 años, continúa en el club, pero bajo otro rol: “No creo que se me vaya el enojo porque dentro de las enfermedades que me podían haber tocado, me toca una que me afecta la mano, los brazos y las piernas. Todo lo que hice durante toda mi vida“.
En una charla con el Diario Clarín, luego recordó cómo fue el inicio de esta durísima enfermedad: “Fue muy duro porque encima fui solo. Lo primero que se me vino a la cabeza fue el problema de Esteban Bullrich, que era el más conocido de todos. Cuando uno no sabe es duro el golpe“.
Siguiendo con la charla, luego el exentrenador de arqueros contó que ya empezó con un tratamiento experimental en Córdoba para combatir con este cuadro degenerativo y que no tiene cura: “Con esto a lo mejor hay alguna posibilidad de que se me detenga un poco la enfermedad. No sabemos. Entonces el hecho de probar está dentro de las posibilidades, así que allá voy“.
El día a día de Gayoso
El héroe silencioso de Boca en muchas tandas de penales reveló en Clarín cómo cambió su día a día desde el diagnóstico: “A la mañana me levanto y me pasa a buscar un compañero. Vamos al club, preparo los entrenamientos de los chicos de tercera hasta novena y después veo un poco los arqueros de Primera“. Luego, agregó: “No puedo mover los brazos y bueno, la pierna derecha estoy un poquito con menos movilidad que la izquierda, así que camino con cuidado para no caerme“.