En el programa “Superfútbol”, que se emite por las mañanas de lunes a viernes en el canal de televisión TyC Sports, el periodista Germán García Grova reveló una información que le brindó un jugador de Boca acerca del estado de ánimo que está atravesando Ander Herrera porque padeció una nueva lesión muscular y, ante esta situación que está viviendo el español, el mismo estaría “destrozado” porque no puede ponerse a la par de sus compañeros y, de continuar así, podría tomar una decisión con relación a su futuro en diciembre.
Está claro que el futbolista vasco, cuando arribó en enero de este año al club boquense, jamás imaginó que estaría sufriendo una seguidilla de complicaciones en diferentes zonas de sus dos tobillos y que le están ocasionando que se la pase más alejado de los campos de juego que intentar ayudar a sus compañeros. De hecho, solamente disputó un puñado de minutos en el debut del Mundial de Clubes con Benfica de Portugal y tuvo la mala fortuna de tener que ser reemplazado.
No obstante, el ex Athletic de Bilbao, que posee vínculo con el “Xeneize” hasta diciembre de 2026, no descartaría colgar los botines siempre y cuando su maltrecho físico le siga jugando una mala pasada, por lo que cuando culmine el semestre se sentará a dialogar con el Presidente, Juan Román Riquelme, y ambos se pondrán de acuerdo y dirimirán qué es lo mejor para su futuro.
Sin embargo, el hecho de que esta nueva molestia muscular sea la quinta en seis meses y la novena desde la temporada 2022/2023 acusaría a que el protagonista en cuestión arriesga demasiado en no prepararse adecuadamente y que quizás algunas veces se haya apresurado en su vuelta como en el caso del match con las “Águilas” en el certamen internacional que se desarrolló en los Estados Unidos.
Se verá entonces si el Director Técnico del conjunto azul y oro, Miguel Ángel Russo, podrá recuperar en algún momento al ex Manchester United de Inglaterra, a quien consideran un titular indiscutido por sus cualidades técnicas y tácticas, pero lastimosamente no ha podido desempeñarse con continuidad.
