En la previa de su séptima carrera con Alpine, el piloto argentino Franco Colapinto afronta el desafío de Spa-Francorchamps, uno de los circuitos más exigentes de la Fórmula 1. Allí buscará no solo mejorar su rendimiento, sino también alcanzar por primera vez la zona de puntos. Mientras tanto, las comparaciones con su compañero Pierre Gasly no solo pasan por la pista, sino también por el salario que ambos perciben.
Gasly cobra 10 millones por año; Colapinto, apenas miles
La diferencia salarial entre ambos integrantes de Alpine es tan marcada como evidente. Mientras Pierre Gasly figura entre los diez pilotos mejor pagos de la parrilla con 10 millones de dólares anuales, Colapinto ni siquiera tiene contrato fijo. El joven de 22 años cobra por participación: unos 41 mil dólares por cada carrera que disputa, sumando hasta ahora 246 mil dólares tras seis presentaciones.
Según datos del reconocido medio inglés RacingNews365, Gasly se ubica en el octavo lugar entre los mejores pagos, detrás de figuras como Max Verstappen, Lewis Hamilton, Charles Leclerc, Fernando Alonso, Lando Norris, George Russell y Carlos Sainz. Una élite que no solo domina en pista, sino también en las cifras que percibe cada temporada.
El sueldo de Colapinto, el más bajo de toda la categoría
El caso del argentino es llamativo incluso dentro de los corredores más novatos. A diferencia de otros pilotos que tienen contratos fijos anuales, Colapinto depende de cuántas veces sea convocado por la escudería. Si completa las 24 carreras del calendario, podría alcanzar el millón de dólares, pero ese escenario aún está lejos de concretarse.
Esta realidad refleja no solo su condición de recién llegado, sino también las exigencias que debe cumplir para afianzarse. El contraste con el resto de los pilotos es abrumador: incluso quienes están en la parte baja de la tabla salarial, como Oliver Bearman, Liam Lawson o Isack Hadjar, tienen contratos que garantizan 1 millón de dólares por temporada completa.
El ranking de los pilotos mejor pagos de la Fórmula 1
El top de los sueldos en la máxima categoría del automovilismo mundial lo encabeza Max Verstappen, quien percibe unos 65 millones de dólares al año con Red Bull. Lo sigue Lewis Hamilton, quien en su llegada a Ferrari firmó por 60 millones. El podio lo completa Charles Leclerc, también en Ferrari, con 34 millones.
Más abajo aparecen nombres como Fernando Alonso y Lando Norris, ambos con 20 millones, y George Russell con 15 millones. Le siguen Carlos Sainz y Pierre Gasly, cada uno con 10 millones. A partir de allí, los sueldos descienden hasta llegar al escalón de Colapinto, quien es, de hecho, el piloto con menor ingreso confirmado en la parrilla.
Una brecha difícil de achicar
El ascenso de Colapinto al máximo nivel del automovilismo mundial es una historia de mérito y constancia, pero también de contrastes. En un universo dominado por contratos millonarios y patrocinios de alto calibre, su posición actual muestra lo desafiante que es consolidarse en la Fórmula 1 sin una estructura económica fuerte detrás. Para igualar esas cifras, el argentino necesitará mucho más que talento: constancia, apoyo financiero y resultados en pista.
Mientras tanto, cada carrera representa una oportunidad no solo deportiva, sino también económica. En Spa, Colapinto buscará acercarse a los puntos y, por qué no, a una renovación contractual que le permita aspirar a una temporada completa.