El mercado de pases 2025 parecía llegar a su fin para Boca, sin mayores sobresaltos ni incorporaciones de última hora. Sin embargo, a menos de 24 horas del cierre oficial en Argentina, Juan Román Riquelme dio un paso que podría cambiar el panorama. La salida de un jugador permitió al club habilitar un nuevo cupo para reforzarse, cuando muchos creían que el libro estaba por cerrarse definitivamente.
La clave del asunto fue Agustín Obando, quien tenía contrato vigente en Banfield pero llegó a un acuerdo para rescindirlo anticipadamente. Su destino será Deportivo Maldonado, en Uruguay, donde jugará a préstamo durante un año. La operación, que a simple vista parecía menor, se convirtió en un movimiento estratégico para el Xeneize.
Obando liberó una chance para reforzar el plantel
Con su salida al exterior, Boca activa un beneficio previsto en el reglamento de la AFA: si un jugador es vendido o cedido a un club extranjero, el equipo argentino queda habilitado para incorporar a otro futbolista hasta el 31 de agosto. Por eso, aunque el mercado cierre este jueves 24 de julio, el Xeneize dispone ahora de más tiempo para sumar un nuevo nombre.
Según informó Germán García Grova, el acuerdo con Obando se formalizará después de las 20 horas, justo cuando termina el período reglamentario. De esta manera, Boca ganará un plazo extra, lo que sugiere que la dirigencia no hizo este movimiento al azar, sino con una idea clara en mente: ir por otro refuerzo.
Boca busca revancha tras la eliminación en Copa Argentina
La intención de reforzar el plantel no es casual. Boca viene de quedar eliminado de la Copa Argentina frente a Atlético Tucumán, una derrota dolorosa que encendió las alarmas internas. En ese contexto, Riquelme decidió intervenir directamente y hablar con el plantel en el vestuario tras la caída en Santiago del Estero.
“Agachen la cabeza y saquen esto adelante. Traguen saliva. De la única manera que salimos adelante es ganando”, fue el mensaje que, según el periodista Emiliano Raddi, dejó el presidente en medio del desconcierto. Con esa frase, dejó en claro que lo ocurrido no puede repetirse.
El futuro inmediato del equipo aún no tiene nombres confirmados, pero todo indica que la dirigencia está decidida a moverse en el mercado. El cupo habilitado por la salida de Obando es una oportunidad que no piensan desperdiciar. Aunque aún no hay indicios concretos sobre el próximo apuntado, está claro que Boca va por más.