Aunque en un principio la idea era cumplir su contrato hasta diciembre, Marcos Rojo ya no quiere seguir en Boca. El defensor central, de 34 años, busca acelerar su salida en este mercado de pases 2025, impulsado por el desgaste en su relación con la dirigencia y la falta de minutos bajo el mando de Miguel Ángel Russo, quien ni siquiera lo incluyó en la lista del Mundial de Clubes.
Según reveló Diego Monroig, el ex jugador del Manchester United “está incómodo y quiere que su salida se concrete ya”. La situación interna se volvió insostenible para el zaguero, que sintió la falta de respaldo institucional, especialmente en momentos clave del semestre. El hecho de no haber sido considerado por el cuerpo técnico para una cita internacional fue el último empujón para tomar una decisión definitiva.
Estudiantes aparece en el horizonte de Rojo
Ante este panorama, Estudiantes de La Plata volvió a escena como posible destino. Aunque Juan Sebastián Verón había negado semanas atrás un posible regreso, ahora el escenario cambió: el “operativo retorno” está en marcha y ya hubo conversaciones entre las partes. Incluso se supo que Rojo habló personalmente con referentes como Carrillo y Ascacibar para tantear el ambiente del vestuario.
La predisposición del jugador es total. Su entorno reconoce que está haciendo todo lo posible para volver al club que lo vio nacer, donde se forjó como profesional y mantiene vínculos afectivos muy fuertes. El regreso, que parecía lejano hace unos meses, hoy está más cerca que nunca.
Domínguez también abrió la puerta
El entrenador del Pincha, Eduardo Domínguez, fue consultado por esta posibilidad en conferencia de prensa. Y si bien fue cauto, dejó una frase que alimentó las especulaciones: “Todos los que salieron de este lugar tienen las puertas abiertas”. Más adelante, agregó: “La jerarquía de Marcos nadie la discute”, en un guiño claro a su posible arribo inmediato.
El futuro del defensor parece encaminado a una resolución rápida. Si bien no hay un acuerdo cerrado entre los clubes, Rojo ya dejó en claro que no quiere esperar a diciembre. Su ciclo en Boca parece haber llegado a su fin, y Estudiantes se ilusiona con el regreso de un símbolo.
