El buen presente de Miguel Merentiel en Boca no ha pasado desapercibido. Luego de destacarse en el Mundial de Clubes, el delantero uruguayo de 29 años comenzó a ser seguido por varios equipos europeos. Entre ellos, uno de los más interesados es el Sevilla, donde el entrenador argentino Matías Almeyda ve en Merentiel una pieza ideal para reforzar su plantel. Sin embargo, en el club de la Ribera, Juan Román Riquelme no está dispuesto a negociar bajo presión.
El respaldo inquebrantable de Riquelme
Para el presidente de Boca, Merentiel no solo es una figura dentro del equipo dirigido por Miguel Ángel Russo, sino también uno de los líderes del vestuario. Por eso, según reveló el sitio Planeta Boca Juniors, el Consejo de Fútbol dejó en claro que el jugador solo saldrá si se abona la totalidad de su cláusula de rescisión, fijada en dieciocho millones de dólares.
Este monto fue comunicado al Sevilla, que atraviesa un momento delicado a nivel financiero. A pesar del interés y de los sondeos iniciales, el club español tendría que desistir de la operación ya que no estaría en condiciones de desembolsar esa suma millonaria en este mercado de pases.
Sevilla, Villarreal y Zenit: un tridente que lo sigue
Aunque el Sevilla parece haber sido el que más insistió recientemente, no es el único en el radar de Merentiel. El periodista uruguayo Martín Charquero recordó que el delantero también fue seguido por el Villarreal CF, aunque en su momento la negociación no avanzó. Por su parte, BOLAVIP confirmó que Zenit de San Petersburgo, de Rusia, también tiene al atacante en carpeta como una posible incorporación de jerarquía.
Los tres clubes saben que no será fácil convencer a Boca ni a su presidente, y que tendrán que poner sobre la mesa cifras importantes si quieren tentar a un futbolista que hoy parece más cómodo que nunca en el club argentino. Merentiel ha demostrado compromiso, rendimiento y liderazgo, cualidades que difícilmente Boca esté dispuesto a perder sin recibir a cambio una cifra acorde.
Un delantero cada vez más clave en el Xeneize
Más allá de los rumores, en el seno de Boca se respira tranquilidad. Merentiel continúa entrenando con normalidad, enfocado en los objetivos deportivos del equipo y sabiendo que cuenta con el respaldo absoluto de una dirigencia que lo considera una pieza fundamental. Su conexión con los hinchas, su entendimiento dentro de la cancha y su carácter competitivo lo han convertido en un emblema silencioso del nuevo ciclo de Russo.
Por ahora, ningún club ha puesto los dieciocho millones de dólares sobre la mesa, y mientras eso no ocurra, Riquelme seguirá firme. “A Miguel no lo regalamos”, aseguran desde el entorno del presidente. Boca, como tantas otras veces, defiende lo que considera suyo con convicción inquebrantable.