El equipo de Miguel Ángel Russo salió al campo de juego en el estadio Madre de Ciudades con la obligación de retornar a la victoria para cortar una racha adversa de nueve partidos sin ganar y seguir en carrera en la Copa Argentina para disputar la fase de grupos de la Copa Libertadores 2026. Sin embargo, Boca perdió ante Atlético Tucumán en los 16avos de final por 2 a 1 y se concretó un nuevo fracaso en la gestión de Juan Román Riquelme.
Durante el transcurso del partido, Boca cayó en los errores repetitivos en defensa y en ataque en las individualidades de depender tanto de Leandro Paredes como Miguel Merentiel. Más algunos destellos de Alan Velasco, que no pudo elaborar su gestación de juego necesaria para crear peligro en el arco rival. Para colmo, Edinson Cavani continuó errático en el arco rival pese a sacarse la espina del gol en el último minuto del partido cunado la historia estaba terminada.
Por su parte, el decano lo esperó y lo fue llevando de a poco al partido para golpearlo en su peor escenario, la pelota detenida. De esta manera, tras un tiro de esquina al área chica el defensor paraguayo Clever Ferreira se escapó de la marca de Marco Pellegrino y abrió el marcador en el Madre de Ciudades.
Boca no pega una en el 2025 y se complicó su presencia en la Copa Libertadores
Luego, de un lateral en ataque Juan Barinaga sacó mal y regaló el contragolpe al rival que en velocidad el ex Instituto de Córdoba Mateo Bajamich aprovechó a la perfección para habilitar al loco Díaz que en la corrida la estiró de más y en el rebote de las piernas de Agustín Marchesín, el cordobés Bajamich la agarró de lleno para el 2 a 0 parcial.
De esta manera, llegó un nuevo cachetazo mortal para la ilusión de Boca de empatar el partido. Por ende, el encuentro que finalizó con la decoración del gol de Edinson Cavani al ultimo minuto de adición se puede decir que “Boca padece de una maldición sin fin que parece no acabar”.
Concretó un nuevo fracaso, en la era de Juan Román Riquelme y no podrá ganar la Copa Argentina como ocurrió también con el Torneo Apertura y el Mundial de Clubes. Por consiguiente, a Boca le queda solamente ganar el Torneo Clausura de la Copa de la Liga o sumar una buena cantidad de puntos en la tabla anual para disputar la fase de grupos de la Copa Libertadores 2026. Si no lo logra, sería el fin para Juan Román Riquelme y toda su gestión.
