Hablar de Juninho Pernambucano es recordar la época dorada del Olympique de Lyon, un Brasil imparable y goles de tiro libre que parecían imposibles. A sus 51 años, el ex mediocampista sigue firme en su opinión sobre el eterno debate entre las leyendas del fútbol: para él, hay un jugador que ha superado a todos, incluso a figuras como Pelé, Garrincha o Diego Maradona.
La primera vez que se rindió a Messi
Aunque muchos lo identifican por sus récords de tiros libres, Juninho siempre ha tenido un lugar especial de admiración hacia Lionel Messi. Lo más llamativo es que esa admiración comenzó mucho antes de los Balones de Oro y las cifras históricas del argentino.
En enero de 2009, en la previa de un duelo de Champions League entre Lyon y Barcelona, Juninho no dudó en elogiarlo: “Es una mezcla de Pelé y Garrincha… Nunca vi a nadie igual”, dijo, sorprendido por el nivel de un Messi que aún no había ganado su primera Champions como titular.
El brasileño aseguraba que no entendía cómo un solo jugador podía influir tanto en el fútbol moderno. Aquella eliminatoria terminaría 6-3 para el Barça, con goles de ambos protagonistas.
Una admiración que creció con los años
Lejos de cambiar de opinión, Juninho ha reforzado su postura con el paso del tiempo. En 2019, incluso expresó que sería un honor que Messi lo superara como máximo goleador de tiros libres: “Si rompe mi récord, me sentiré orgulloso, porque nadie puede compararse con lo que hizo en estos 20 años”, afirmó con total admiración.
El exvolante sabe lo que es enfrentarlo: en cuatro partidos contra el argentino, Messi marcó cuatro tantos y fue decisivo en cada cruce. Para Juninho, aquel joven que enfrentó en 2007 y 2009 ya mostraba señales de ser el mejor de todos los tiempos.
El rey de los tiros libres
A pesar de su devoción por Messi, Juninho sigue ostentando un récord difícil de igualar: 77 goles de tiro libre a lo largo de su carrera profesional, cifra que lo coloca por encima de especialistas como Ronaldinho o David Beckham.
Desde Recife hasta los estadios más grandes del mundo, jugó 816 partidos, anotó 198 goles y levantó 25 títulos entre clubes y selecciones. Un legado que lo mantiene como un referente eterno del fútbol brasileño y mundial.