Inserto en un contexto macroeconómico caracterizado por la volatilidad, la industria las apuestas online en Argentina da cuenta de un notable crecimiento. A su favor tiene el fenómeno de la digitalización y una siempre vigente cultura deportiva. Por otro lado, existen debates en el marco un proceso de regulación en las distintas provincias.

De ese modo, el mercado nacional de apuestas online constituye un tema de estudio apasionante en materia de economía. Con una estructura descentralizada, ingresos constantes que cimientan el crecimiento y la realidad de la informalidad constituyen un escenario complejo que vale la pena desglosar.
Dimensión económica y proyecciones
Hoy en día se estima que los ingresos totales de la industria de las apuestas online en nuestro país alcance la cifra de 1.570 millones de dólares en 2025. La tasa de crecimiento anual proyectada, por su parte, sería del 4.49% hasta el año 2029. Se supone que para entonces, el mercado podría exceder los 6.600 millones de dólares.
Semejante crecimiento se proyecta considerando una base de usuarios en expansión, la cual, se estima, pasará de los 4.3 millones el año pasado a 4.8 millones para el próximo. Esas cifras no contemplan solamente una demanda in crescendo de entretenimiento digital, sino que da cuenta de un potencial más que considerable en términos de recaudación fiscal.
El marco regulatorio supone la clave que precisa la estructura económica de la industria del juego online. Contrario a modelo homogéneo de rigor nacional, en Argentina se concedió la potestad de regular el iGaming a las 24 jurisdicciones provinciales. Como consecuencia directa, se crearon múltiples mercados, cada uno con distintos regímenes, tanto de carácter fiscal como de licencias.
Así, por ejemplo, la Provincia de Buenos Aires puso en vigencia un sistema de licencias que atrajo la atención de operadores internacionales de renombre, al imponer un impuesto del 25% aplicados sobre los ingresos brutos de la industria del juego online.
En términos de inversión, el mercado argentino es a un tiempo atractivo y desafiante. Por un lado, basta con considerar la extensión y el potencial de crecimiento. Estamos hablando de una población de más de 46 millones de personas y una reconocida pasión por el deporte y, principalmente, el fútbol. Tal es así que la demanda, sobre todo en lo que respecta a apuestas online, parece contar con garantía. No obstante, por otro lado, los desafíos resultan intimidantes. Principalmente, la aludida fragmentación en términos regulatorios compele a los operadores a deambular por 24 marcos legislativos diferentes, aumentando de ese modo los costos de cumplimiento.