El Gran Premio de Azerbaiyán llega en un momento clave para Franco Colapinto, que atraviesa una temporada complicada en la Fórmula 1 y busca volver a sumar. En la previa al circuito urbano de Bakú, el argentino habló con la prensa, analizó el presente de su equipo y respondió a los rumores sobre su futuro.
Consultado por ESPN sobre la presión que siente en medio de especulaciones, el bonaerense contestó con firmeza: “No se puede controlar lo que pasa alrededor, ese ruido externo no es algo que me esté influyendo”. Reconoció que la campaña no viene como esperaba, pero destacó que lo importante es mantenerse enfocado: “No estamos sumando puntos, no es un buen año, pero en lo personal lo esencial es progresar y sentirme más cómodo con el auto”, expresó.
Rumores, Alpine y lo que viene en 2026
En las últimas semanas, versiones europeas lo vincularon con un lugar asegurado en Alpine junto a Pierre Gasly a partir de 2026. Si bien no quiso confirmar detalles, Colapinto remarcó que su objetivo es mejorar con cada carrera: “Estoy trabajando bien con el equipo, logrando casi todos mis objetivos personales. Claro que el coche no es consistente, en algunos circuitos somos competitivos y en otros no tanto, pero en general estoy contento con mi progreso”, señaló.
En la misma línea, en declaraciones a Motorsport, insistió en que los rumores no lo afectan: “Ha habido muchos rumores y no los leo mucho. Estoy acostumbrado, en este deporte siempre pasa lo mismo”, dijo el joven piloto de 23 años.
Bakú, un circuito especial para Colapinto
El trazado callejero de Bakú es uno de los más desafiantes del calendario. Colapinto lo conoce bien y recordó con alegría su paso por 2024, cuando, con apenas dos carreras en la F1, logró terminar octavo con Williams y sumó sus primeros puntos en la categoría. “Fue un fin de semana que parecía difícil, pero andar bien me dio confianza para el futuro”, aseguró.
De cara a esta edición, reconoció las dificultades que presenta la larga recta del circuito y los baches típicos de la ciudad: “Con esta recta nos va a costar, pero trataremos de dar lo mejor y buscar cada detalle para estar más cerca de esa performance que queremos”, explicó.
Un piloto que también se ríe de sí mismo
Más distendido, Colapinto contó entre risas que está intentando aprender francés para comunicarse mejor con Gasly: “Estoy dedicando mucho tiempo a Duolingo, pero no lo consigo todavía. Me enfado cuando Pierre empieza a hablar en francés y no entiendo nada. Lo estoy intentando, pronto hablaré un poco más”, confesó en F1TV.
La cita de Bakú será una nueva prueba para el argentino, que combina autocrítica, ambición y madurez, en busca de consolidarse en la Fórmula 1 y callar rumores con resultados.