Juan Román Riquelme ya apunta los cañones a lo que será el mercado de pases de inicios de 2026. La dirigencia del Club Atlético Boca Juniors trabaja puertas adentro en la búsqueda de refuerzos, pensando en la Copa Libertadores del próximo año. Mientras tanto, el equipo comandado por Miguel Ángel Russo ya volvió a los entrenamientos en la semana, tras lo que fue el insólito empate ante Central Córdoba de Santiago del Estero en La Bombonera.
Pensando en la oportunidad de volver a disputar el máximo certamen de Conmebol, la dirigencia Xeneize no quiere repetir los tropiezos que viene sufriendo el club en los últimos años. Es por esa razón que apuntan a seguir por la línea del pasado mercado, donde lograron cerrar el regreso de Leandro Paredes.
Allí es donde aparece el plan de Miguelo, que es el de potenciar la columna vertebral. Ante esta situación, se piensa en un refuerzo por línea: un defensor central, un 5 y un delantero. Y precisamente, en la última línea del equipo azul y oro, el gran anhelo del deté sigue siendo Gastón Hernández, jugador a quien conoce muy bien.
El actual capitán y referente de San Lorenzo de Almagro hace tiempo que está en el radar azul y oro, justamente por pedido de Russo, quien ya lo dirigió en el club de Boedo. En el pasado mercado, la dirigencia de Boca ya se había contactado con el zaguero, pero nunca lograron un acuerdo, influenciados con el conflicto que hubo, precisamente, por la salida del DT de un club a otro, lo que generó polémica.
El motivo por el que Hernández vuelve a sonar en Boca
El capitán del Ciclón siempre estuvo en el radar, pero hay un factor clave que podría desencadenar su llegada: las posibles salidas. Nicolás Figal podría emigrar, y Lautaro Di Lollo llama la atención en Europa, por lo que un posible adiós en Boca podría ser el desencadenante de la llegada de Hernández en 2026.
