«Si vos me decís gusto propio, prefiero jugar de volante central: ahí jugué casi toda mi carrera y, además, tengo más conocimiento del puesto. Jugar con Lea (Paredes) es una locura, jugamos juntos dos veces en la Selección (Colombia y Brasil) en 2018 y acá nos reencontramos, cosas de la vida. Es un pibe fantástico. Tenemos muy buen diálogo y nos respetamos mucho los dos”, comenzó con sus elogios el jugador de Boca, Rodrigo Battaglia, para con su compañero a la revista oficial “Desde la Boca”.
El futbolista que heredó la número “6” de Marcos Rojo siguió ponderando: “Es un jugador de muchísima jerarquía, bárbaro en todo aspecto, como líder, como persona. Me saco el sombrero. Sabemos que cuando le damos la pelota él puede meter un pase que los demás ni siquiera vimos».
Con respecto a su actualidad y cómo se siente en el club boquense, el ex Huracán fue sincero: “Llevaba cuatro meses en Atlético Mineiro, andaba bien, me trataban bárbaro y (Luiz) Scolari me había dado la cinta de capitán cuando me llamó Raúl (Cascini) para venir. Era complicado en ese momento. Por suerte se dio ahora: estoy maduro y siento que es el broche de oro para mi carrera.
“Al principio fue un poco abrumador: todo el día y en todos lados se habla de Boca. Sabía que ese era el precio por jugar acá y se lo dije a mi familia: ‘Deben entender que si ganamos va a estar todo bien y si perdemos van a leer barbaridades de todo tipo’. Es la dinámica de las redes sociales, del club y del país”, fue punzante con su análisis el ex volante central del Sporting Braga de Portugal.
Se verá entonces si esas críticas que al principio parecían que podían desestabilizarlo emocionalmente, en base a esfuerzo y dedicación, logró transformarlos en aplausos y reconocimientos, por lo que en el mediocampo se ha vuelto un nombre muy importante y en ladero indispensable para el ex Roma de Italia.