Aunque la carrera de Lionel Messi en la Selección Argentina está llena de títulos y momentos gloriosos, todavía siguen apareciendo anécdotas ocultas de su etapa juvenil. En las últimas horas, el histórico PF Gerardo Salorio sorprendió al contar un episodio ocurrido en el Mundial Sub 20 de 2005, donde la Pulga tuvo un fuerte cruce con un compañero de equipo.
El rosarino ya había mostrado todo su talento en Países Bajos, torneo en el que fue figura y máximo goleador, para terminar levantando el trofeo junto a una generación inolvidable. Sin embargo, lo que casi nadie conocía es que, puertas adentro, también hubo tensión entre algunos jugadores del plantel.
El recuerdo de Gerardo Salorio
En una entrevista, el preparador físico relató lo sucedido: “Garay tira una piña, le pega a él y se hace el tonto. Y queda Oberman cara a cara con Messi, que lo quería fajar y lo agarra del cuello”, contó con crudeza. La escena dejó en shock a los presentes, ya que involucraba nada menos que al futuro capitán de la Albiceleste.
Salorio explicó que tuvo que intervenir rápidamente para evitar que la situación pasara a mayores. “Cuando pasa eso, vos los tenés que hacer ir a dormir. A la noche leí un libro sobre adolescencia y al día siguiente los reúno a todos. Estaban con cara de traste por la pelea de la noche anterior”, recordó, mostrando cómo intentó manejar el conflicto con disciplina y pedagogía.
El pacto que cambió todo
El profe reveló también la manera insólita en la que resolvió la tensión entre Messi y Oberman. “Los llamo a los dos y les hago poner la mano arriba de un libro. Les pedí que juren que iban a dejar de hacer boludeces y jugar por la Argentina”, confesó. Lo llamativo es que, tras ese momento, ambos respondieron de la mejor manera dentro de la cancha.
En el siguiente encuentro, Argentina ganó 3-0, con dos goles de Messi y uno de Oberman. Para Salorio, ese partido fue una demostración de que el grupo había entendido el mensaje y que el episodio quedó atrás. “Ganaron 3-0, con dos de Messi y otro de Oberman”, remarcó, como símbolo de que el compromiso con la camiseta pudo más que las diferencias personales.
Una anécdota que resuena con los años
El paso del tiempo hizo que esta historia salga a la luz cuando Messi ya transita la recta final de su trayectoria en la Selección mayor. Para los hinchas, el recuerdo mezcla nostalgia por aquel título juvenil y sorpresa por la intensidad de un plantel que supo transformarse en campeón.
Así, una nueva página se suma a la extensa biografía de Lionel Messi con la camiseta albiceleste: la del genio que, incluso en sus inicios, mostraba carácter y temperamento para defender sus convicciones dentro y fuera de la cancha.