La llegada de Leandro Paredes a Boca no solo le dio jerarquía al equipo, sino que también potenció a Rodrigo Battaglia. Los números de la temporada 2025 muestran un salto de calidad evidente en el rendimiento del volante de 34 años, que a inicios de este año llegó al Xeneize desde Atlético Nacional por pedido de Fernando Gago, aunque Juan Román Riquelme ya lo había buscado en otros mercados de pases.
Según el marcador Sofascore, antes de compartir el mediocampo con Paredes, Battaglia había disputado 20 partidos (como defensor y volante central) con una media de 2,9 recuperaciones y 1,7 quites por partido, ganando el 58% de los duelos.
Desde el arribo del volante campeón del mundo, Battaglia jugó 8 encuentros en los que elevó su aporte defensivo: 5,1 recuperaciones por partido, más de la mitad de lo que registraba antes, y un 66% de duelos ganados, con un leve incremento en los quites (1,8 por partido). Además, mantuvo su cuota goleadora (2 tantos en ambos periodos).
Además, los mapas de calor refuerzan la idea: antes, Battaglia se movía en un radio mucho más reducido, mientras que ahora ocupa mejor los espacios, con mayor presencia en campo rival y un protagonismo más equilibrado.
En resumen, la presencia del ex-Roma liberó a Battaglia, que pasó de un rol más posicional y aislado a ser un mediocampista con más influencia, intensidad y efectividad en ambas facetas del juego.