Martín Palermo lleva muchos años como Director Técnico y a lo largo de su carrera dirigió a algunos equipos del fútbol argentino como algunas instituciones del continente. Actualmente se encuentra en Fortaleza, pero antes de su arribo a Brasil, dirigió a Olimpia en Paraguay. En esa experiencia por el fútbol guaraní tuvo a delanteros de relevancia como Darío Benedetto y Lucas Pratto, dos ex Boca. En el tramo final de su trayectoria, el “Oso” mantuvo una entrevista con el periodista Juan Pablo Varsky en “Clank!”, y allí reveló un episodio que no había salido a la luz: el cruce con el “Titán” que casi termina a las piñas.
“Si yo veo algo malo, que no hay algo para que nos una bien por el bien común y no me sirve… Yo he tenido discusiones con Martín. Yo lo adoro y para mí es una de las personas más importantes de mi carrera futbolística, por todo lo que representaba cuando era chico y cuando yo llegué a Primera, él me ayudó muchísimo. Sin embargo, lo tuve de entrenador y casi nos vamos a las manos“, reconoció el ex Vélez.
Quien fuera una figura muy destacada en River lleva casi 20 años como jugador profesional y una de sus últimas etapas se dio en la Liga paraguaya con la camiseta de dicho club. En su recuerdo de su pasado por el “Decano”, recordó sus cruces con el ex número “9” y los motivos de estos cara a cara.
“Él respetando su forma de ser y yo la mía. Pero siempre llegábamos a un acuerdo o entendíamos que era lo mejor para el club y para cada uno.También sabiendo que yo soy futbolista, somos muy egoístas, pero en ese egoísmo, pregono el bien del equipo”, mencionó el delantero, que después profundizó sobre uno de esos episodios.
Allí, reconoció que su forma de ser le ha traído problemas y habló sobre una de sus lesiones: “Martín se enojó porque cuando me fui sintiendo mejor, yo veía cosas que no me gustaban. Y le decía ‘estás poniendo a este todos los partidos y a mí no me ponés ni 15 minutos’. Él me decía que no me veía bien. Yo le digo ‘la realidad que no estoy para titular, pero sí para 20 o 30 minutos y si no empiezo a jugar, no me voy a poner bien nunca’. Fueron discusiones así y después otras cosas”.