La eliminación en la Copa Argentina dejó a River golpeado y con la obligación de reaccionar de inmediato. El equipo de Marcelo Gallardo necesita reencontrarse con el triunfo frente a Gimnasia de La Plata, pero la preocupación ya está puesta en el Superclásico que se viene. A pocos días del choque con Boca, el técnico podría tener ausencias importantes.
El principal foco de alarma es Sebastián Driussi, quien volvió a sentir una molestia muscular en el isquiotibial izquierdo, la misma zona que se había lesionado semanas atrás. El delantero debió dejar la cancha antes del cierre del primer tiempo ante Independiente Rivadavia, y en las próximas horas se someterá a estudios médicos para conocer el grado de la lesión.
Driussi, la gran incógnita
La situación del atacante preocupa porque venía de una recuperación exigente y todo apuntaba a que estaba en condiciones de volver al cien por ciento. Si los resultados confirman una nueva lesión, Driussi podría quedar descartado para el Superclásico del 10 de noviembre, una baja que obligaría al cuerpo técnico a buscar alternativas ofensivas.
Más allá de su impacto en el ataque, el ex Austin FC es uno de los referentes del vestuario, y su ausencia sería un golpe duro para el plantel. En caso de no llegar, Facundo Colidio se perfila como el reemplazante natural.
Gallardo también analiza cuidar a los amonestados
Otra preocupación pasa por los jugadores que están al límite de sanciones. Lucas Martínez Quarta, Marcos Acuña y Lautaro Rivero suman cuatro tarjetas amarillas en el campeonato y una más los dejaría afuera del clásico. Por eso, Gallardo evalúa darles descanso ante Gimnasia, para evitar riesgos innecesarios.
En ese escenario, futbolistas como Paulo Díaz, Sebastián Boselli y Milton Casco podrían ingresar en la rotación para el duelo en el Monumental. El DT sabe que el choque con Boca definirá gran parte del cierre de la temporada, y no quiere llegar con más problemas físicos o disciplinarios de los necesarios.
River, golpeado pero aún en carrera, se juega una final anticipada en los próximos días. Las próximas horas serán claves para saber si Driussi podrá decir presente en el partido más esperado del año.
