El fallecimiento de Miguel Ángel Russo dejó un profundo vacío en el fútbol argentino. Y especialmente en Boca, donde el entrenador había iniciado su tercer ciclo al frente del club. En medio del dolor y la conmoción, la directiva xeneize tomó una decisión clave sobre el futuro inmediato del equipo.
Úbeda seguirá al frente de Boca hasta diciembre
Según se confirmó desde el club, Claudio Úbeda, quien ya venía desempeñándose como entrenador interino durante la ausencia de Russo por motivos de salud, continuará en el cargo hasta fin de año. La idea es mantener la estabilidad del grupo y respetar el trabajo iniciado por el histórico DT.
La decisión fue tomada por la dirigencia encabezada por Juan Román Riquelme, que consideró que este no era el momento para realizar cambios estructurales. Recién en diciembre, una vez concluida la temporada, se evaluará si Úbeda seguirá al frente del equipo o si se buscará un nuevo proyecto deportivo para 2026.
El actual entrenador cuenta con el respaldo del plantel y del cuerpo técnico que acompañó a Russo. Además, continuará con el mismo esquema de trabajo mientras el club atraviesa este difícil momento institucional y emocional.
Boca postergó su partido y despidió a Russo en La Bombonera
El duelo entre Boca y Barracas Central, previsto para este sábado, fue suspendido por decisión de la AFA y se reprogramará en los próximos días. La determinación se tomó en respeto al fallecimiento de Russo y a la situación emocional del plantel, que aún se encuentra profundamente afectado.
Durante el jueves y viernes, La Bombonera abrió sus puertas para que jugadores, dirigentes, hinchas y ex futbolistas pudieran despedir a Miguel Ángel Russo, uno de los entrenadores más queridos y exitosos en la historia del club.
Los desafíos que quedan por delante
En lo futbolístico, Boca buscará cerrar el año de la mejor manera posible. El equipo marcha en los primeros lugares del Torneo Clausura 2025 y se mantiene entre los puestos de clasificación a la Copa Libertadores 2026. La misión de Úbeda será sostener el rendimiento del equipo y mantener viva la ilusión de terminar el año con un título, en honor a la memoria de Russo, un ícono que dejó una huella imborrable en el club.