El clima en River sigue cargado después de la derrota frente a Boca. El Superclásico dejó heridas abiertas y un ambiente de tensión que Stefano Di Carlo busca revertir cuanto antes. Con el objetivo de recuperar la confianza del plantel y sostener el ciclo de Marcelo Gallardo, el presidente del club decidió intervenir de manera directa.
El respaldo a Gallardo en medio de la crisis
Desde que asumió, Di Carlo dejó claro que Gallardo tiene todo el apoyo dirigencial. A pesar de la racha negativa que atraviesa el equipo, el mandatario apuesta a la continuidad del entrenador y ya le ofreció renovar su contrato hasta 2026. Esta postura calmó los rumores sobre un posible cambio de rumbo en el banco de suplentes, al menos por ahora.
Sin embargo, el mal rendimiento en el último Superclásico volvió a encender las alarmas. La falta de reacción del equipo generó preocupación entre los hinchas y los propios dirigentes, que consideran fundamental recuperar la identidad futbolística antes del cierre del Torneo Clausura.
Una visita con mensaje claro
Esta mañana, Stefano Di Carlo se presentó en el River Camp para conversar personalmente con el cuerpo técnico y los jugadores. Según contó el periodista Juan Patricio Balbi, el presidente observó la práctica y mantuvo un diálogo directo con Gallardo. Por su parte, Sebastián Srur remarcó que “Gallardo tiene todo el apoyo dirigencial. Todo el apoyo”, despejando cualquier duda sobre el respaldo institucional.
El gesto del presidente fue interpretado como una señal de confianza en el proceso, pero también como un llamado a la reacción inmediata. River afrontará una semana decisiva, con partidos que pueden definir su futuro tanto en el Clausura como en la clasificación a la Copa Libertadores 2026.
Qué busca Di Carlo con su decisión
El dirigente considera que la mejor manera de superar la crisis es reforzar la unidad interna. Por eso, su visita al entrenamiento no fue casual: quiere transmitir respaldo, pero también exigir compromiso. La dirigencia sabe que se aproxima un tramo determinante del año y pretende que el equipo recupere la solidez que lo caracterizó en los mejores momentos del ciclo Gallardo.
De cara a los próximos compromisos, se espera que el técnico mantenga la base titular, aunque podría haber algunos ajustes tácticos para intentar levantar el nivel colectivo. En River hay confianza, pero también urgencia: el objetivo es volver a ganar y despejar cualquier duda sobre el rumbo del proyecto.
