El paso de Valentín Barco por Boca dejó huella, y aunque hoy disfruta de su presente en Europa y en la Selección Argentina, el joven futbolista no oculta su deseo de tener una nueva oportunidad con el club que lo vio nacer. Desde la concentración de la Albiceleste, el Colo concedió una entrevista en la que habló con el corazón y dejó en claro que todavía tiene cuentas pendientes con el Xeneize.
“Me quedó la espina”: el Colo Barco y su deseo de revancha
Barco reconoció que aún no logra superar la derrota ante Fluminense en la final de la Copa Libertadores 2023, un partido que marcó un antes y un después en su carrera. “No volví a ver la final del Maracaná porque fue muy duro para todos. Me quedó una espina ahí, pero ojalá que en el futuro se pueda dar”, confesó en diálogo con ESPN.
A pesar de su presente europeo, el lateral izquierdo no descartó un regreso a Boca más adelante: “Ojalá que pueda tener revancha porque es un club que me dio todo desde los 9 años y estoy muy agradecido. Me gustaría”, aseguró.
Orgullo por Paredes y alegría por el Superclásico
Durante la charla, Barco también destacó la importancia del retorno de Leandro Paredes al club: “Es un jugador de élite, un referente y capitán. Le mandé un mensaje para decirle que me guarde las cinco”, contó entre risas, dejando ver el cariño que mantiene con sus excompañeros.
Además, el Colo celebró el reciente triunfo en el Superclásico ante River, donde no ocultó su felicidad por uno de los protagonistas: “Estoy muy contento por el Chango. Desde chico se veía el potencial que tenía, es rápido, le pega con las dos y ahora lo está demostrando”.
Un sentido recuerdo para Miguel Russo
Barco también aprovechó el momento para rendir homenaje a Miguel Ángel Russo, el técnico que lo hizo debutar en la Primera de Boca. “Me dolió mucho su partida. Fue el que me subió al plantel, una gran persona. Nos golpeó a todos, pero sé que desde arriba sigue alentando”, expresó con emoción.
Con apenas 21 años, Valentín Barco sigue mostrando madurez y gratitud hacia el club que lo formó. Su futuro inmediato está en Europa, pero su corazón, está claro, sigue latiendo azul y oro.
