El próximo domingo desde las 16:30 horas en La Bombonera, se llevará a cabo una nueva edición del Superclásico del fútbol argentino. Es uno más en una larga historia de cruces entre Boca y River, que data sus comienzos en 1913 y que, a lo largo de toda la historia, cuenta con anécdotas para los libros y que siempre son recordadas en la previa de un nuevo partido.
Incluso, también ha habido casos insólitos de traspasos de jugadores de un grande a otro, sin escala, algo que con el paso del tiempo se ha vuelto cada vez menos común. Pero en el pasado, hubo un ejemplo icónico. Se trata de Jorge Higuaín, padre de Gonzalo, el recordado exdelantero de la Selección Argentina. El Pipa supo jugar con la camiseta azul y oro entre 1986 y 1987.
Sin embargo, pese a que llegó a vestir la azul y oro y hasta también portó la cinta de capitán, poco después pasó ni más ni menos que al cuadro de Núñez. Rápidamente, esto fue considerado una traición, pero el ex futbolista habló con DSports hace un tiempo y justificó su decisión.
“Para nosotros es una profesión, tenemos otra mirada, defendemos la camiseta que tenemos puesta. Entiendo las críticas del hincha, pero uno es profesional”, explicó Higuaín en su momento. Es un hecho que poco le importó haber vestido la camiseta de Boca, y luego haber pasado a jugar en River en 1988, siendo un caso más que llamativo y que, con el paso del tiempo, quedó en una anécdota para palpitar los clásicos de hoy en día.
El paso del Pipa Higuaín por Boca
Jorge Higuaín llegó en 1986 a Brandsen 805. El marcador central proveniente de San Lorenzo se ganó la titularidad de manera instantánea con Mario Zanabria, y la mantuvo con César Luis Menotti, incluso llegando a ser capitán. En total, jugó 64 partidos oficiales y metió cinco goles durante sus 18 meses vistiendo de azul y oro. Luego pasó al Stade Brestois y tras una temporada, el Flaco Menotti lo llevó a River.
